Contrario a registrar incrementos en venta de bebidas embriagantes en expendios y supermercados, éstas decrecieron con la Ley Seca, ya que según se argumentó, no se comparan las ventas de lunes a jueves con las de lunes a domingo; además que las ventas de los días previos a la suspensión de la comercialización no compensan las ventas regulares.
“Contrario a registrar incrementos en las ventas, hay decrementos. En mi caso vendo la mitad de lo normal con las restricciones vigentes durante viernes, sábado y domingo”, comentó Manuel Trejo, propietario de un expendio, añadiendo que las compras de último momento no compensan lo que se comercializa regularmente en fines de semana.
Asimismo, el entrevistado expuso que tienen varios factores en contra derivado de las medidas por la Ley Seca, como por ejemplo el horario de cierre a las 18:00 horas de lunes a jueves, ya que las personas acuden a comprar dichos productos luego del trabajo, y para esa hora ya no alcanzan; por otro lado –dijo-, a un buen porcentaje de la población les pagan en viernes, entonces es cuando aumentan las ventas.
“El tema de los horarios y el pago de salarios en fines de semana nos afecta bastante”, añadió Trejo, que expuso que al menos en su caso la hora crucial para la comercialización es entre 17:00 y 18:00 horas, pero que una hora no es suficiente para compensar lo de toda una semana.
Derivado de la baja en las ventas, compartió que se vio en la necesidad de disminuir también el salario a sus trabajadores, los cuales están conscientes de que es momentáneo en lo que se normaliza la situación de estos negocios.
Mientras que en supermercados de la ciudad de igual forma presentan decrementos en este sentido, y que lo mismo ocurrió en la pasada Ley Seca decretada en el mes de noviembre de 2020, cuando también se aplicó por el tema del semáforo epidemiológico.
Se argumentó que es “imposible” vender de lunes a jueves lo que se vendía de lunes a domingo, porque mucha gente no es previsora y no compra desde antes, aparte que un buen porcentaje no tiene el ingreso suficiente para gastar adelantado, sobre todo en la crisis que se derivó por la pandemia.
Además –se comunicó-, hay supermercados donde el 80 por cientos de sus clientes son mujeres, las cuales usualmente no compran bebidas alcohólicas más que las de una despensa normal.
Te puede interesar: