Con malabares, ballet, equilibrio y aros hula hula, Alin Ruiz se encargó de relatar cómo una mariposa nace y toda su vida la dedica a la polinización, acción que redunda en beneficio de los seres humanos.

El acto circense fue parte de la concienciación de la importancia de las mariposas en el marco del Programa Monarca que lanzó el Ayuntamiento de Chihuahua para entregar plantas polinizadoras que coadyuven en la conservación de la mariposa monarca y el resto de los insectos polinizadores como por ejemplo la abeja.

La artista circense puso el toque artístico a la entrega de 250 plantas polinizadoras, ataviada con un traje en color claro con motivos de flores y mariposas, empezó a girar los aros como si fueran sus alas. En su montaje artístico relató las cuatro fases de su metamorfosis: huevo, oruga, crisálida y mariposa, y cómo toda su vida se dedican a transportar el polen de las flores a diversas plantas, con lo cual ayudan en la polinización.

Dentro de los ecosistemas ocupan un rol relevante, siendo normalmente medidores de la calidad ambiental y el estado de conservación de un ecosistema.

Esta presentación se enmarca en el Día Mundial del Medio Ambiente, en que se recordó que Chihuahua participa en la iniciativa “Mi Municipio con la Monarca”.

La monarca es reconocida, además de su colorido, por su increíble fenómeno migratorio, lo que la convierte en el insecto que lleva a cabo la migración más extensa y en mayor número. La razón fundamental de por qué las mariposas monarcas realizan estos viajes de migración, radica en la necesidad de reproducirse. Para esta especie sólo es posible alcanzar la maduración sexual con el calor primaveral, por lo que buscan hibernar en un lugar donde la temperatura no sea tan extrema y puedan sobrevivir al invierno. Una vez que llegan los primeros días de primavera se reproducen y emprenden su regreso hacia el norte, para terminar su ciclo de vida que luego comenzará en una nueva mariposa.

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