Luego de la agresión en contra de tres personas al interior de un bar en la ciudad de Cuauhtémoc, de las cuales una perdió la vida y dos más resultaron con heridas graves, el Presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Julián Estrada Andujo, alertó a los comerciantes del giro de bares a no caer en extorsiones en las que amenazan con ataques armados en caso de no cumplir sus exigencias.
El líder empresarial declaró que mandos policiacos descartaron que la agresión del pasado 28 de agosto fuera en contra del bar en donde perdió la vida un hombre, esto luego de especulaciones en las que se alertaba por agresiones en contra de negocios que se oponen al “cobro de piso”.
Además, Estrada Andujo, recomendó a la población en general no difundir en redes sociales datos personales que pueden ser utilizados por los delincuentes para luego hostigar a la ciudadanía para afectarlos en su economía, acción que se ha corroborado al recibir información precisa de las víctimas sobre sus actividades o las de su familia.
Trascendió que días después del ataque armado al conocido bar “las Trancas”, en donde perdiera la vida un hombre y dos más resultaron heridos de gravedad, supuestos integrantes de un grupo criminal intentaron extorsionar a dueños de otros bares y restaurantes de Cuauhtémoc, bajo la amenaza de que, si no pagaban determinada cantidad, las consecuencias sería similares al del bar antes citado.
Luego de mantener acercamiento con mandos policiacos de los tres niveles de Gobierno, tanto FICOSEC como el Consejo Coordinador Empresarial fueron notificados de que la agresión del 28 de agosto fue dirigida a las víctimas, descartando que exista en el municipio el cobro por “derecho de piso” como sucede en otras ciudades de la entidad.
Afortunadamente no se han reportado víctimas de extorsión, por lo que para dar certidumbre a los comerciantes se establecerán campañas de prevención de estafas a través de llamadas telefónicas, de las que se pide hacer caso omiso, sobre todo al tratarse de ladas de otros puntos del país.
Además de los intentos de extorsión o estafas, comerciantes de bares se ven afectados en su imagen tras hechos violentos que crea el pánico entre los parroquianos, lo que contribuye a que una vez más la “vida nocturna” en Cuauhtémoc disminuya y se afecté la economía de bares, cantinas y centros nocturnos.