El director Ejecutivo de la Junta Central de Agua y Saneamiento (JCAS), Mario Mata Carrasco, dio a conocer la aprobación del proyecto ejecutivo para la construcción de una planta tratadora de aguas residuales en la ciudad de Cuauhtémoc, la cual tendrá una inversión de 600 millones de pesos y se contempla concluir en el lapso de un año 6 meses en el sector donde actualmente se encuentra la planta tratadora que funciona desde hace más de 20 años.
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Mata Carrasco recordó que, desde su ingreso a la JCAS, entre sus compromisos con la población de Cuauhtémoc fue el contar con una planta tratadora de aguas residuales de una mayor capacidad que la existente en la actualidad, para lo cual, dijo que se han efectuado gestiones ante el banco de infraestructura de Norteamérica, además del apoyo en este aspecto comprometido también por la gobernadora del Estado María Eugenia Campos Galván.
Dijo que el proyecto ejecutivo está contemplado a efectuarse en lo que resta del presente año, para luego establecer los mecanismos legales que permitan para el año 2024 llevar a cabo el avance de tan importante obra.
El funcionario destacó las estrategias que se analizan para dar utilidad del agua tratada en las actividades de sector agropecuario, esto con el fin de reducir en gran escala la sustracción de agua del acuífero que será para el abasto del suministro para consumo humano.
Refirió que uno de los principales objetivos que tiene la JCAS, es la sustentabilidad hídrica que implica una alianza con organismos como el Comité Técnico de Aguas Subterráneas (COTAS), establecido en el municipio de Cuauhtémoc, para que haya gobernabilidad en la extracción de agua del subsuelo.
“No le queremos quitar un litro de agua al sector agropecuario, pero establecemos dos condiciones, una que no crezca la frontera agrícola porque el estado de Chihuahua no soporta un crecimiento más”, aseveró el funcionario.
El segundo punto dijo, es tecnificar los sistemas de riego por goteo en el municipio de Cuauhtémoc como ya se ha hecho en algunos otros municipios de la entidad en donde se ha tenido éxito en ello, además de dar utilidad al agua tratada para los cultivos.
Destacó que, en el caso de Cuauhtémoc, es la producción de maíz lo que origina un mayor consumo de agua, por lo que dijo que es en este sector en donde se deben tomar en cuenta las opciones de modificar el cultivo o mejorar las condiciones de riesgo por sistemas israelitas que son de gran utilidad.
