Algunos comerciantes y ciudadanos del municipio de Cuauhtémoc han expresado su preocupación por el sabotaje que se realiza en contra de la obra del Corredor Comercial.
Así lo dio a conocer uno de los locatarios, quien prefirió omitir su nombre para evitar algún tipo de represalia.
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El quejoso explicó que al inicio del proyecto, todos estaban de acuerdo y aplaudieron la obra, sin embargo, conforme se fueron haciendo los retornos, muchos de los locatarios o personas que acuden a ciertos lugares de los campos menonitas, comenzaron a inconformarse.
La molestia de esas personas obedece a que antes de las obras, muchos habitantes de la zona y gente con sus comercios en el lugar, no respetaban ninguna regla de tránsito y se acostumbraron a cruzarse por cualquier lugar, lo que a su vez ocasionaba muchos accidentes, algunos fatales, ya que los choques, con frecuencia invadían los carriles contrarios.
Según comenta el ciudadano, el tema de los accidentes y las fatalidades en ese corredor, se redujeron drásticamente desde que se comenzaron a poner las estructuras de contención centrales, pues aunque sí se han registrado accidentes (en menor cantidad), ya no se invaden los carriles contrarios.
Comentó que a pesar de este evidente cambio positivo, mucha gente está enojada porque los retornos no les favorecen, pues ahora sólo hay 13 de ellos, y muchos locatarios quieren retornos frente sus negocios o muchas personas quieren retornos directos a los caminos que conducen a sus fincas.
“No me gustaría señalar directamente a comerciantes menonitas, pero según los testimoniales, la mayoría de quienes están quitando las vallas o quienes obligan a los trabajadores a retirarlas, sí son de origen menonita, aunque también se han visto a diversos ciudadanos”, comentó el denunciante.
Añadió que resulta también preocupante que muchos de los saboteadores se disfracen de sicarios para amedrentar a los trabajadores que realizan la obra, pues esto podría generar otro tipo de violencia por parte de los grupos de la delincuencia organizada, ya que la situación se presta a confusiones y desinformación.