Cuauhtémoc, Chih.- Desde septiembre de 2020, se anunció la construcción de una nueva celda en el basurero municipal que se ubica en Ejido Ciénega de Castillo, la cual tendría un costo de 15 millones de pesos y contaría con la tecnología de un relleno sanitario.
Pedro José González Baray, director de Servicios Públicos Municipales, informó que no se realizó y que se previó fuera el corazón de un relleno sanitario, proyecto que se difirió por falta de recursos. Dijo esperar que el próximo Gobierno Municipal lo construya.
Sin embargo, antes de la promesa de la celda se descartó el proyecto del relleno sanitario por el actual Gobierno Municipal debido al alto costo que representaba, de hasta 80 millones de pesos.
“Estaba contemplado iniciarlo en este ejercicio 2021, pero no hubo la coordinación, faltaron recursos, involucrar a otras dependencias del estado o la federación; no se pudo concretar y por consecuencia no se pudo iniciar esa primera celda o fosa”, dijo el entrevistado.
Agregó que hubo avances importantes en cuanto a la disposición del terreno, pues de 8 hectáreas que les rentaban a los habitantes de Ejido Ciénega de Castillo, el espacio aumentó a 13 hectáreas, donde en acuerdo con los propietarios ahí se construiría el relleno sanitario.
“Están dispuestos a firmar un arrendamiento a muy largo plazo, pensando en la vida útil de la obra. A final de cuentas la ubicación puede variar, llevarse a otro lugar, ahí intervendrán algunas dependencias relacionadas con el cuidado del medio ambiente”, dijo.
Se pronunció porque la administración entrante lleve a cabo el proyecto incluso con el apoyo de instancias internacionales.
Comentó que diariamente se reciben en el basurero municipal alrededor de 240 toneladas de basura, de las cuales 160 se generan en la ciudad de Cuauhtémoc, no obstante ahí se recibe toda la que se genera en Anáhuac, el corredor comercial y empresas que van y descargan directamente.
“El problema de la contaminación está controlado. Le damos el mejor manejo diario, tenemos maquinaria para extender la basura y le aplicamos una capa de tierra”, indicó y expuso que el último problema que se les salió de control fue que debido a los vientos, cierta cantidad de basura se dispersó en las comunidades cercanas de Ciénega de Castillo, Barraganes y Táscate del Águila, donde están por concluir con la recolección de la misma.