Una empleada de un negocio local en Cuauhtémoc, fue víctima de una extorsión telefónica, al hacerla creer que un supuesto empleado del SAT, le exigía dinero a cambio de renovación de la cédula fiscal y el certificado del negocio, por lo cual decidió depositar más de 10 mil pesos.
Fue el pasado 9 de junio, a las 15:32 horas, cuando se reportó un caso de llamada de extorsión que dejó en alerta a un establecimiento ubicado en las calles Reforma, entre 3a y 5a, en la zona centro. Los agentes de la Policía Municipal, a través del Mando Único, acudieron rápidamente al lugar para brindar apoyo.
En el establecimiento, los agentes se entrevistaron con una joven de 23 años de edad, empleada del negocio denominado Super Reforma. La joven relató que a las 15:00 horas recibió una llamada telefónica proveniente del número 3322800815. En la llamada, el interlocutor preguntó por el propietario del negocio, proporcionando correctamente el nombre de la persona.
El presunto extorsionador se hizo pasar por un individuo llamado Rubén Ortega, quien afirmó ser empleado del Servicio de Administración Tributaria (SAT). Bajo esa identidad falsa, le informó que era necesario realizar una renovación de la cédula fiscal y el certificado del negocio. Asimismo, afirmó que enviarían un paquete al establecimiento a través de una empresa de paquetería en cualquier momento.
Para recibir el paquete, el estafador exigió a la joven realizar un depósito de 53 mil 983 pesos. Ante la imposibilidad de contar con esa suma, la empleada informó que solo disponía de 10 mil 550 pesos en efectivo. El delincuente le indicó que esa cantidad era suficiente y le instó a acudir a un OXXO cercano para realizar el depósito en un plazo de 15 minutos.
La empleada siguió las instrucciones y realizó la transacción solicitada. Sin embargo, después de efectuar el depósito, se comunicó con el propietario del negocio, quien le confirmó que no esperaba ningún paquete y que había sido víctima de una extorsión telefónica. Ante esta situación, los afectados notificaron de inmediato a la Policía Municipal.
Los agentes brindaron orientación a la empleada y al dueño del negocio para que acudieran a la Fiscalía de Distrito Zona Occidente y presentaran una denuncia formal por los hechos sucedidos.
La llamada de extorsión ha generado preocupación en la comunidad empresarial, ya que demuestra la capacidad de los delincuentes para manipular información y utilizarla con fines ilícitos. Las autoridades locales hacen un llamado a la población a mantenerse alerta y a tomar precauciones para evitar ser víctimas de este tipo de engaños.
