Tras cumplirse seis meses de que pobladores de comunidades del municipio de Guazapares denunciaran una grave contaminación en ríos y arroyos de la región por el uso inadecuado de materiales tóxicos por parte de gambusinos, a la fecha, no se ha dado respuesta a las quejas ciudadanas, por lo que una vez más urgieron la intervención del estado para frenar problemas de salud que sufren principalmente menores de edad.
Los denunciantes, que insisten en permanecer en el anonimato al desconocer el origen de la contaminación, señalaron que luego de publicarse el pasado mes de noviembre en El Heraldo de Chihuahua la serie de quejas, personas que se identificaron como empleados de Gobierno del Estado, efectuaron una supervisión en los cuerpos de agua de la zona.
Te puede interesar: Denuncian que gambusinos de Guazapares utilizan materiales tóxicos para extracción de metales
Posteriormente, indicaron que el problema corresponde al depósito de material utilizado para la separación de metales en el sector minero, sin embargo, informaron a los pobladores que la solución al problema le corresponde a la Presidencia Municipal.
Refieren que dicha visita se registró el mes de marzo y desde entonces, no han tenido respuesta alguna sobre la atención que amerita el caso, mismo que afirman, es cada vez más riesgoso para la salud de los habitantes de por lo menos tres rancherías, en las cuales ya se han presentado problemas gastrointestinales en los menores de edad.
Destaca que, desde el mes de noviembre, se denunció que supuestos gambusinos utilizan materiales tóxicos para la extracción de metales que son descargados por la empresa minera de la región tras obtener el mineral requerido.
De acuerdo a los quejosos, son cerca de seis meses que habitantes de comunidades de Guazapares, principalmente Hubarachi, se han visto afectados por el escurrimiento de lo que denominan “jal”, el cual explican, es material tóxico que usan los gambusinos para extraer el metal de los residuos de las minas, problema que a la fecha cumple un año sin ser atendido.
Señalaron que dicho material pasa por los patios de las viviendas y ocasiona malestares a los habitantes, por lo que ya han denunciado la problemática a la autoridad local sin que haya respuesta a sus planteamientos, surgiendo versiones de que quienes realizan estas malas prácticas son gente involucrada en la delincuencia organizada.
Lo anterior mantiene con temor y en incertidumbre a los pobladores, por lo que públicamente solicitaron la intervención de la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano, ya que ante la posibilidad de que grupos delincuenciales se involucren en la actividad gambusina, y con ello ocasionen daños al medio ambiente, como sucede con la tala clandestina de árboles.