Tras permanecer por más de 24 horas en la sala de resguardo de la funeraria “Mausoleos, Luz Eterna”, los cuerpos de los sacerdotes jesuitas, Javier Campos Morales y Joaquín Campos César Mora Salazar, fueron trasladados a la capital del estado a bordo de dos diferentes vehículos pasadas las 9 de la mañana del sábado 25 de junio.
Sin más compañía que la de los trabajadores de la citada funeraria, los cuerpos de los sacerdotes llegarán directamente al templo del Sagrado Corazón de Jesús, ubicado sobre la avenida 20 de Noviembre, esto a las 12 del mediodía en donde se les ofrecerá una misa de cuerpo presente.
Será en ese punto en donde se lleve a cargo el cortejo fúnebre, para luego ser enviados sus restos al seccional de Creel, en el municipio de Bocoyna, para ofrecer hacer lo propio en el templo del lugar y luego trasladar sus restos a la comunidad de Cerocahui en donde se desarrollará el funeral principal y el respectivo sepelio durante el domingo y lunes 26 y 27 de junio respectivamente.
Durante su permanencia en la salda de la funeraria en ciudad Cuauhtémoc, autoridades eclesiásticas no permitieron el acceso a personas interesadas en dar el último adiós a los clérigos, esto como parte del protocolo de la iglesia católica en este tipo de sucesos, por lo cual se espera que cientos de fieles estén presentes en las misas de cuerpo presente que se ofrecerá a los sacerdotes.
Durante el trayecto al templo del Sagrado Corazón de Jesús, las dos Suburban que trasladaron los cuerpos de los sacerdotes jesuitas, no se registró caos vial.
Desde la entrada de Cuauhtémoc a Chihuahua pasaron sin acompañamiento de corporaciones policiales, según trascendió, así lo habrían pedido los jesuitas.
Sobre la avenida 20 de Noviembre comenzó el operativo de cierre de la calle Ramirez a la Terrazas y de la 20 a la altura de la Unidad de Bajo Riesgo.
En el lugar unidades de Policía Vial y algunas de la Municipal comenzaron a desviar a los automovilistas que intentan pasar por dicho tramo, en el que se espera se intensifique la seguridad