Mobiliario húmedo, libros mojados y abecedarios hechos pedazos son algunos de los destrozos que causaron las goteras en el salón de primero y segundo grado de la escuela primaria Amado Nervo, ubicada en la colonia Junta de los Ríos.
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Para muchos, la lluvia es una bendición, para otros es un sufrir, ya que ven cómo su esfuerzo se desmorona y se echa a perder, como en esta escuela, que desde hace años se encuentra en el abandono, pues no ha recibido mantenimiento.
El techo del salón que alberga a los grupos de primero y segundo grado está sumamente deteriorado, incluso se puede apreciar un boquete, que se junta con varias goteras, pues se podría decir que llueve más adentro que afuera.
Las últimas lluvias han ocasionado que los pequeños sufran las consecuencias del deterioro en la infraestructura, pues junto con su maestra tienen que mover sus bancos a un espacio diminuto donde no se filtra el agua.
La maestra Guadalupe Hernández, titular del grupo, informó que desde hace dos meses han sufrido las inclemencias climatológicas.
“Nada más hay un espacio en medio donde nos ponemos cuando llueve los niños y yo. Se me mojó el material, el alfabeto, libros de los niños, incluso trabajos que hacen las mamás. Ahorita estoy cambiando los escritorios a un pedazo donde no se gotea. Ayer los puse a secar”, refirió.
Acotó que cuando está lloviendo y hay clases, se acomoda ella y sus alumnos en un pequeño espacio donde no hay goteras, donde están secos, pero amontonados.
Para finalizar, mencionó que hicieron solicitud a las autoridades educativas que los apoyen con impermeabilización, tomando en cuenta que la condición del plantel está muy abandonada y rezagada.
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