El abogado Arturo González Rascón explicó que la aplicación del Nuevo Código Nacional de Procedimientos Penales restringe en gran medida la posibilidad de la prisión preventiva, que en su opinión debió aplicarse a los siete presuntos hombres armados que fueron detenidos por la policía estatal, tras un enfrentamiento en Namiquipa y que fueron liberados recientemente por orden de un juez federal.
Indicó que si el antecedente marca que los delincuentes se enfrentaron contra la autoridad en una balacera, se tenían los elementos necesarios para aplicar la prisión preventiva y con ello evitar que se evadan de la acción de la justicia mientras continúen las indagatorias.
González Rascón consideró que tener en libertad a este tipo de personas es riesgoso para la sociedad, por lo que en los cargos se pudo haber acreditado el homicidio en grado de tentativa por el ataque a la autoridad, lo que pudo haber evitado su liberación.
Al quedar libres, los siete hombres debieron haber acreditado domicilio fijo y su arraigo en la zona, a través de su familia y de sus propiedades, debido a que se trata de otro de los puntos que se consideran por parte de las autoridades. En caso de que la procedencia de los involucrados se ubique en otro estado del país, no se hubiera permitido su salida, debido a que, según la ley, podrían evadirse de la justicia.
“Ellos se enfrentaron contra la policía y con armas prohibidas por la ley federal, por eso creo que se debió aplicar la prisión preventiva” dijo el litigante.
Agregó que la tenencia del arma de uso exclusivo del Ejército no alcanza para dictar prisión preventiva, pero que en este caso se agredió a la policía, por lo que habría la posibilidad de haber dictado homicidio en grado de tentativa; “las balas no eran para acariciar a los policías” citó irónico.