Delicias.- Ya sea porque bajan en busca de alimento o porque su hábitat fue invadido por los desarrollos urbanos, la presencia de tlacuaches o zarigüeyas aumentó durante las últimas semanas en la zona urbana del municipio, donde los ciudadanos se alarman al confundirlos con ratas gigantes por no conocer a estos marsupiales.

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Juan Carlos Torrecillas, jefe del departamento de Ecología en el municipio, comentó que durante esta temporada se incrementan los avistamientos de tlacuaches, especie que está protegida por el Gobierno y con la cual se debe tener cuidado de no hacerles algún daño.

“Muchos ciudadanos los ven y los confunden con ratas de gran tamaño y lo primero que hacen es querer matarlos”, comentó el funcionario.

Dijo que los marsupiales solamente bajan a la ciudad en busca de comida atraídos por los olores que salen de las viviendas y basureros. También es común verlos últimamente debido a que el crecimiento de la mancha urbana invade su hábitat natural.

“Entonces esto deriva que ellos entren a nuestros domicilios… esto se presenta un poquito más en las colonias de la periferia, en aquellas colonias que están un poquito más nuevas, un poquito más en las orillas de la ciudad: Cumbres del Deporte, Colinas del Valle, Monte Albán, etcétera, que antes era campo abierto y pues ya hay domicilios”, explicó.

Recomendó a los ciudadanos, primero, no entrar en pánico al momento de encontrarse con este u otro tipo de animal silvestre y, en segundo lugar, alejarse, ya que es el ser humano quien puede hacer más daño a la fauna.

Las zarigüeyas en específico son inofensivas y lo que se puede hacer –aconsejó- es llamar al departamento de Bomberos y al departamento de Ecología para que las lleven a algún sitio despoblado.

“Es muy complicado porque todos los animalitos requieren un trato diferente, entonces lo primero que hay que hacer es llamar y alejarnos del lugar para no entrar en pánico”, reiteró el entrevistado.

Agregó que desde hace algunos años se ha vuelto normal ver animales propios del semidesierto en la ciudad, sobre todo a finales de la temporada invernal, cuando salen de sus madrigueras para terminar su periodo de hibernación.

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