Con el apoyo de organizaciones de la sociedad civil que imparten charlas para generar conciencia, el gobierno municipal se encuentra interviniendo en las instituciones educativas para atender el problema del bullying o acoso escolar, informó el alcalde Jesús Valenciano García.
De manera conjunta con los directivos que así lo solicitan, el gobierno municipal participa con agrupaciones como Agentes de Cambio para la Prevención del Suicidio (ACAPS) en distintas escuelas, a las cuales llevan pláticas para persuadir a los estudiantes de abandonar conductas que lastimen a sus compañeros, señaló el edil.
Asimismo, comentó que se está llevando a cabo un tamizaje en los plantes educativos para canalizar a los alumnos que se encuentren en situación de conflicto.
“Tenemos un tamizaje ya muy avanzado, desde una gran mayoría de las escuelas, empezando a nivel secundaria y bachillerato, y nuestra intención pues es continuar haciéndolo y empezar a canalizar a estos niños y estos jóvenes, que nosotros les denominamos en situación de conflicto, con la red de terapeutas”, detalló.
El presidente municipal mencionó que recientemente concluyó en el DIF una certificación de una red de terapeutas, en coordinación con el Fideicomiso para la Competitividad y Seguridad Ciudadana (FICOSEC).
Y en próximas fechas se tendrá una segunda certificación de terapeutas con la Fundación del Empresariado Chihuahuense (FECHAC), agregó Jesús Valenciano.
Un problema social
Sandra Gutiérrez Fierro, secretaria de Educación y Deporte del Gobierno del Estado, consideró por su parte que el acoso escolar es un problema social, por lo que es responsabilidad de toda la comunidad y no sólo de las instituciones educativas.
Explicó que del Marco Nacional de Convivencia, con el cual se rigen las escuelas, se deriva el marco local para la construcción de los acuerdos de convivencia en cada plantel. Y en ese marco, subrayó, no existen ya los reglamentos como tales. En la construcción de estos acuerdos participan padres de familia, directivos, personal y alumnos.
Sin embargo, señaló que la violencia que afecta a la comunidad en general ha permeado al interior de las instituciones educativas, por lo que el problema se debe resolver no sólo en las escuelas, sino también en otros espacios de socialización.
Expuso que, por ejemplo, los alumnos de nivel básico pasan sólo la tercera parte de su tiempo en las aulas, por lo que se han intensificado las acciones para prevenir la violencia, esto en total apego a los derechos humanos de los niños y adolescentes.
La funcionaria estatal consideró que deben fortalecerse las normas de convivencia por medio de acciones conjuntas, mencionando que el sector educativo ha establecido alianzas con varias instituciones que coadyuvan a prevenir el bullying.