Padres de familia de la Escuela Secundaria Federal Leyes de Reforma volvieron a manifestarse este martes, para exigir una auditoría externa a los recursos manejados por la anterior mesa directiva de la sociedad de padres, pues señalaron que hay un posible desfalco de dinero.
➡️ Recibe las noticias directo a tu celular. Suscríbete aquí a nuestro canal de WhatsApp
Además, trascendió que el director de la escuela, Antonio González Quintana, quien apoyaba a los padres de los alumnos en su reclamo, fue separado del cargo la tarde del lunes después de que un grupo de maestros pidiera su destitución.
Durante la mañana de este martes el grupo de padres inconformes acudió nuevamente al plantel educativo para exigir a Efraín Araiza Sánchez, supervisor de la zona escolar 20 y quien se quedó encargado de la dirección, que se realizara una auditoría externa para conocer con exactitud el estado de las finanzas de la secundaria.
Los quejosos denunciaron que, mientras ellos dialogaban con el inspector, dos empleadas de Servicios Educativos del Estado de Chihuahua (SEECH) se introdujeron a la secundaria para llevarse las cajas con los documentos de contabilidad, en los cuales está registrado el uso dado al dinero de la sociedad de padres de familia.
Una de las madres de familia refirió que dos alumnas vieron y grabaron con sus celulares el momento en que sacaron las cajas con documentos por la puerta trasera del plantel, lo cual generó mayor inconformidad, amagando los paterfamilias con cerrar la escuela.
Otra mujer aseveró que hubo un desfalco de los recursos de la sociedad de padres de familia, razón por la cual insisten en que se lleve a cabo la auditoría.
Los alumnos de la secundaria, por su parte, manifestaron su apoyo al director Antonio González, de quien se dijo sería reubicado en otra escuela. A temprana hora, los escolapios colocaron pancartas afuera del plantel para pedir que se quedara el maestro González Quintana.
Una madre de familia señaló que el director fue víctima de un complot orquestado por los maestros, quienes estaban descontentos porque los vigilaba que desempeñaran eficientemente su labor docente.
Los padres de familia coincidieron en que el maestro Antonio González trataba bien a los alumnos y que incluso ponía dinero de su bolsa para arreglar desperfectos en las aulas, lamentando que el resto de los docentes no lo hayan dejado ejercer su rol.