Aunque los precios del ganado bovino aumentaron desde el último año en los Estados Unidos, esto no beneficia a los productores pecuarios de la región, ya que debido al tipo de cambio peso - dólar continúan ganando prácticamente lo mismo por los becerros que exportan.
Manuel Balderrama, presidente de la Asociación Ganadera de Saucillo, señaló que el precio de la libra de carne aumentó en 40 centavos, pues el año pasado se vendía a 2 dólares y ahora se cotiza en 2.40 dólares, lo que significa un incremento significativo.
Sin embargo, expuso que con el actual tipo de cambio (a 17.16 pesos por dólar este jueves), es casi nulo el beneficio que obtienen los ganaderos por la venta de sus becerros en la Unión Americano, pues ganan sólo un peso más por cada kilo de carne en comparación con el año pasado.
“Ese tipo de cambio sí está muy bien para apoyar todo lo que es importación, pero para el aparato productivo nacional es ponernos contra la pared”, sintetizó el presidente de la asociación ganadera.
Recordó que la situación actual es similar a la que se tuvo cuando Carlos Salinas de Gortari era presidente del país, ya que en aquella época el peso se mantuvo sobrevaluado en relación con el dólar y se fomentaron las importaciones de todo tipo de bienes, lo cual consideró inapropiado, pues los gobiernos deberían fomentar las exportaciones para beneficiar la economía nacional.
No obstante, afirmó que la gente del campo chihuahuense posee mucho temple para afrontar las situaciones adversas, pues cuando no le afectan las sequías o la falta de apoyos, lo hacen los vaivenes en el tipo de cambio peso- dólar.
Además, comentó que desde el año pasado se ha visto una recuperación ligera en el hato ganadero, el cual quedó mermado por la sequía que duró de 2019 a 2021, pues el año pasado, durante los meses de agosto y septiembre, se presentaron lluvias que reverdecieron los agostaderos.
Dijo que la mayoría de los productores pecuarios conservó algunas becerras previendo aumentar su hato, pues muchos vendieron animales para poder sostenerse, esperándose que repunte la producción de bovinos en la zona del semidesierto.
Agregó que la esperanza de los ganaderos es que este 2023 lleguen por lo menos las lluvias normales, señalando que el periodo de precipitaciones en esta región es del 15 de julio en adelante.