DELICIAS.- Las presas La Boquilla y Francisco I. Madero, que nutren a los distritos de riego 005 y 113, continúan sin registrar aumentos en sus niveles de almacenamiento pese a las lluvias; por el contrario, el volumen almacenado en los dos embalses se mantiene a la baja por las extracciones para cumplir con el plan de riegos.
Esta falta de escurrimientos hacia las presas se debe a la resequedad del subsuelo, el cual está absorbiendo toda la humedad de las precipitaciones, explicó el meteorólogo meoquense Florencio Rodríguez Loera.
La Comisión Nacional del Agua informó que la presa de La Boquilla, en el municipio de San Francisco de Conchos, se encontraba este sábado al 21.4 por ciento de su capacidad y almacenaba 609.293 millones de metros cúbicos.
Esto significa que el embalse ha disminuido su almacenamiento en 26.246 millones de metros cúbicos en una semana, ya que el sábado 25 de junio contaba con 635.539 millones de metros cúbicos y estaba al 22.3 por ciento de su capacidad.
De igual manera, la presa Francisco I. Madero, enclavada en el municipio de Rosales, también ha visto disminuido su almacenamiento en los últimos siete días: de 118.77 millones de metros cúbicos a 112.794 millones, hallándose este fin de semana al 33.8 por ciento de su capacidad.
Lo anterior representa que las precipitaciones pluviales en la parte alta de las cuencas de los ríos San Pedro y Conchos han sido insuficientes, pues no han generado escurrimientos que desemboquen en las presas.
Florencio Rodríguez Loera, especialista certificado por el Servicio Meteorológico Nacional, explicó que la ausencia de aportaciones a los cuerpos de almacenamiento se debe a que el subsuelo está reseco, por lo cual éste absorbe toda la humedad que han dejado las primeras lluvias de la temporada.
Estimó que después del 10 de julio, cuando se espera que las precipitaciones se generalicen, comiencen a registrarse los primeros incrementos en los niveles de almacenamiento de las presas, puntualizando que estos serán muy ligeros, de dos o tres centímetros a lo mucho, lo cual es normal.
Señaló que a finales de agosto o principios de septiembre podría haber una recuperación importante en los niveles de las presas, mencionando que incluso existe la posibilidad de que “Las Vírgenes” se llene e incluso vierta excedentes.
Asimismo, afirmó que este año las precipitaciones pluviales estarán ligeramente arriba de lo normal, de acuerdo con los modelos de pronóstico, lo cual es algo alentador para los hombres y mujeres del campo.