MEOQUI.- La misa que se realizaría la tarde de este domingo en honor a Jessica Silva se canceló, debido a la negativa del párroco a celebrarla en el sitio donde los agricultores mantienen el bloqueo de las vías del tren.
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El evento litúrgico se tenía contemplado a las 18:00 horas junto a las vías férreas en Estación Consuelo, pueblo del que Jessy era originaria.
La hora llegó y los minutos pasaron, pero ningún sacerdote de la zona se hizo presente en el lugar, donde había alrededor de 150 personas reunidas.
Saúl García, líder campesino, pidió disculpas a la gente, explicando que el párroco de Lázaro Cárdenas se negó a que el servicio fuera oficiado a la intemperie, junto a las vías, pues según él esto se prestaría a que algunas personas quisieran "hacer negocio".
García acusó que el párroco bloqueó a los sacerdotes de las comunidades aledañas para que no celebraran la misa.
Criticó esta postura del religioso, pues recordó las palabras de Cristo, quien dijo que donde dos o más se reunieran en Su Nombre ahí estaría Él. Igualmente cuestionó que en la presa Boquilla sí se hubiera celebrado un servicio al aire libre y no en Estación Consuelo.
Esto indignó a las personas reunidas junto a las vías, entre las cuales se encontraban el esposo, la hija y la madre de Jessy, quienes reiteraron el reclamo de justicia.
Se tomó la decisión de rezar el rosario para pedir por el descanso de Jessy, quien cumpliría 36 años este domingo.
En la oración participaron mujeres del coro, que acompañadas de guitarras entonaron cánticos religiosos.