Los beneficios de las lluvias no cesan de reflejarse en los niveles de almacenamiento de las presas Boquilla y Vírgenes, donde en las últimas horas se registraron aumentos significativos que prometen una recuperación de los embalses, los cuales se encontraban casi a la mitad de su capacidad.
Rosalío Núñez Gallegos, jefe operativo del Distrito de Riego 005, informó que del martes al miércoles la presa Francisco I. Madero registró un aumento de veinte centímetros en su escala, lo cual equivale a un volumen de 4.76 millones de metros cúbicos.
Dicho cuerpo de agua amaneció ayer al 54.3 por ciento de su capacidad, lo que representa un almacenamiento de 192.8 millones de metros cúbicos. Hasta la mañana del miércoles la presa continuaba cerrada a la extracción debido a la humedad que dejaron las lluvias.
La Boquilla amaneció al 64.1 por ciento de su capacidad y almacenaba 1 mil 855 millones de metros cúbicos, tras incrementar cuatro centímetros en su escala por los escurrimientos en la cuenca del río Conchos. Esto representa un ingreso de 5.13 millones de metros cúbicos al embalse.
Así mismo, Núñez Gallegos detalló que la extracción en la boca de toma de la presa más importante del estado es de cinco metros cúbicos por segundo.
Mencionó además que se ha dejado de extraer un volumen pequeño de las dos presas, el cual se usará en septiembre, mes en el cual concluye el ciclo agrícola.