Inspectoría del Trabajo durante este periodo agrícola 2018 logró detectar a 132 menores laborando en surcos, turnando los casos a la PGR por tratarse de delitos federales, los cuales se pueden castigar desde 5 a 250 salarios mínimos a quien ocupe a menores de quince años de edad en labores peligrosas o insalubres, declaró en entrevista Eva Gabriela Tena Ramírez, presidenta de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje.

La inspectoría de Trabajo y Previsión Social que depende de la Secretaría de Trabajo, se dio a la tarea de inspeccionar la región en los ranchos agrícolas, en este año se lograron detectar a 132 menores trabajando en el campo, los cuales fueron canalizados a la PGR ya que es un delito federal aceptar a menores en trabajos pesados.

Tena Ramírez informó que las irregulares que más se reportan en estos centros de trabajo, es la falta de seguridad social, contratos, jornadas laborales extensas, les faltan necesidades básicas como transporte, sanitarios, incluso cobros altos en albergues de jornaleros.

Todo esto es detectado a través de Inspectoría del Trabajo, donde se pretende localizar a menores trabajando, esta labor consiste en detectar, dar por enterada a la PGR, luego se turna al Ministerio Público para llevar a cabo indagatorias y ahí termina su labor.

El Programa de Atención a Jornaleros Agrícolas Migrantes en las dependencias que ahí participan se ha enfocado este año en la atención de la niñez migrante, para en conjunto con los productores detectar las necesidades más apremiantes de la comunidad jornalera para llevar a cabo los servicios y apoyo de Gobierno del Estado.

La secretaria Ana Luisa Herrera manifestó que esta es una oportunidad de hacer conciencia y emprender acciones que realmente inhiban dicha problemática, “aún falta mucho por hacer en el estado, debemos poner fin al trabajo infantil, pues erradicarlo es tarea de todos”.

En Chihuahua se pueden ver muchos niños y niñas trabajando sobre todo en el campo y en empleos informales, hay que fortalecer a las empresas y darles opciones para erradicar el problema de fondo.

En Chihuahua se estima según cifras del módulo de trabajo infantil del INEGI en el 2013 que 22 mil 737 menores entre los 5 y 17 años de edad trabajan en el estado. Para abatir esta realidad es necesario que se involucren todas las instancias de gobierno y de la sociedad civil, es un problema multifactorial en el cual se debe garantizar en principio que los ingresos familiares sean suficientes para que los niños y niñas no deban abandonar la escuela para ir a trabajar y especialmente que se deben atender aquellos que se encuentren en situación de vulnerabilidad.

En México la ley castiga de uno a cuatro años de prisión y multas desde 5 a 250 salarios mínimos a quien ocupe a menores de quince años de edad en labores peligrosas o insalubres, como las actividades agrícolas o a campo abierto, labores de construcción como la industria ladrillera, al interior de las minas, trabajos ambulantes, salvo autorización especial de la Inspectoría del Trabajo, así como el almacenamiento o despacho de sustancias químicas peligrosas, entre otros.

Las normas que contemplan el trabajo para adolescentes de entre 15 y 17 años de edad, siempre y cuando no se trate de labores que representen un riesgo o violenten sus derechos humanos y laborales, es el área de la inspectoría la que atiende todo lo relacionado. Se otorga la autorización al adolescente siempre y cuando se cumpla con los requisitos del trabajo.

Se solicitan como requisitos fundamentales que los menores continúen con sus estudios, deben de presentar una constancia, un certificado médico y el consentimiento por oficio firmado de los padres o tutores, para que puedan laborar.

La Secretaría de Trabajo del estado de Chihuahua, tiene como tarea primordial erradicar a fondo el trabajo infantil, hay que destacar que este tema es tarea de todos, la secretaria de Trabajo y Previsión social, Ana Luisa Herrera Laso, está muy comprometida con el tema y en emprender acciones que realmente inhiban dicha problemática.