DELICIAS.- Héctor Bermúdez, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), vaticinó que este 2022 será un año complicado para la industria asentada en la región debido a la escasez de agua, ya que el sector secundario depende en su mayoría de las actividades agropecuarias.
Al mismo tiempo, advirtió que existe el riesgo de que el semáforo retroceda y esto obligue nuevamente a los cierres de empresas, las cuales no resistirían este embate.
“Vamos muy ligados al campo aquí en la región; la mayoría de la industria aquí es agroindustria. El panorama se ve muy similar al año pasado, por el hecho también de la escasez del agua: las presas no lograron su recuperación estimada para lograr tener otra vez un ciclo de cultivo al cien por ciento”, expuso.
El dirigente de los industriales señaló que este ciclo agrícola sólo se podrá irrigar entre el 30 y el 50 por ciento de la superficie del distrito, lo cual afectará de manera directa e indirecta a todos los demás sectores productivos.
“Entonces se estima que sí va a haber un panorama un poco difícil, a lo mejor un poco más benéfico que el año pasado debido a que tenemos la capacidad de producción un poco más arriba”, enfatizó.
Además, recordó que el sector industrial no puede dejar de lado el tema de la pandemia, porque si el semáforo retrocede muchas empresas no resistirían un embate tan fuerte. Hace un año, evocó, hubo confinamientos por causa del Covid y el Producto Interno Bruto del país se desplomó.
“Y pues no podemos permitirnos como sociedad deliciense o de la región tener otro embate de esa naturaleza”, expresó.
De las ramas industriales que podrían verse más perjudicadas por los cambios en el semáforo, están las fábricas de muebles y las empresas meta- mecánicas, ya que no se consideran esenciales en los cierres.