Secundando las acciones realizadas a nivel estatal en las extensiones de la Universidad Autónoma de Chihuahua, trabajadores sindicalizados de esta casa de estudios tomaron la mañana de este lunes las instalaciones de la Facultad de Ciencias Agrícolas y Forestales y de la Facultad de Contaduría y Administración.
Los trabajadores emprendieron lo anterior en solidaridad con sus compañeros que fueron afectados en su aumento salarial, principalmente los que se encuentran en las categorías A y B, que son los que tienen más antigüedad laboral.
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En la Facultad de Ciencias Agrícolas y Forestales, la toma de las instalaciones inició desde las 7:00 horas, lo que afectó principalmente a los estudiantes de nuevo ingreso que acudieron a llevar documentación, quienes encontraron las puertas cerradas.
Sonia Ruíz, delegada sindical en la facultad mencionada, señaló que en esta institución educativa laboran 53 trabajadores sindicalizados, de los cuales la mayoría pertenece a la categoría A, quienes exigen un salario de 6 mil 800 pesos quincenales y no los 6 mil 100 que pretende pagarles la universidad.
Explicó que ya se había pactado un aumento salarial del 20% a los trabajadores, pero rectoría sólo les está dando el 4%. Señaló que esto representa un golpe al bolsillo de los sindicalizados, razón por la que decidieron secundar las acciones realizadas por sus compañeros en todo el estado.
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La delegada admitió que la toma de la facultad molestó a algunos de los estudiantes, pues hay los que tienen que recorrer media hora para llegar a la escuela. Sin embargo, recordó que los trabajadores también tienen sus derechos e invitó a los alumnos y padres de familia a apoyar las reivindicaciones del sindicato.
De la misma manera, los catorce trabajadores sindicalizados de la Facultad de Contaduría y Administración pararon labores y tomaron las instalaciones de la institución educativa, para exigir respeto al aumento salarial pactado.
En esta facultad, son tres los trabajadores que se encuentran en la categoría A y dos en la B, mientras que los nueve restantes ganan el salario mínimo. Se quejaron de que su sueldo no alcanza para satisfacer todas sus necesidades, por lo que algunos deben laborar dos turnos o tomar un segundo trabajo.
Refirieron que el salario en las diferentes casas de estudio es desproporcionado, ya que mientras los empleados de la UNAM ganan 16 mil pesos al mes, en la UACH un trabajador sindicalizado gana como mínimo 7 mil 400 pesos mensuales.