Un inspector escolar ha presentado una denuncia formal alegando la violación de sus derechos laborales debido a una reasignación que, según él, perjudica significativamente su desempeño profesional. La medida, que implica un cambio en sus zonas de trabajo habituales, ha sido calificada por el inspector como injusta y contraria a sus derechos laborales.
Se trata del inspector escolar Humberto Vélez, quien denunció irregularidades en su plaza laboral, donde sus supervisores le informaron de manera verbal que su zona de trabajo será dividida, dejándolo en municipios con más de 20 horas de separación en comunidades muy alejadas dentro de la Sierra Tarahumara.
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El profesor Vélez indicó que además de darle parte de su zona a otro inspector, también le quitaran maestros que él mismo había conseguido para varios municipios al sur del Estado, en donde ha trabajado por más de 17 años, lo cual lo tiene inconforme y ha interpuesto al menos dos amparos para componer la situación, al mismo tiempo que ha entregado diferentes oficios y escritos las autoridades educativas del estado, sin embargo, no ha obtenido respuesta de ninguna dependencia.
Humberto contó que desde mayo del 2008 inició trabajando como supervisor de educación física en la zona 36 del estado, la cual abarca los municipios de Cuauhtémoc y sus comunidades, Namiquipa y sus alrededores; el Charco del municipio de Chihuahua; San Francisco de Borja, Nonoava, Belisario Domínguez; Gran Morelos; Batopilas; Samachique y Bocoyna con sus comunidades y parte de Ocampo, así como Basaseachi y Huajumar.
En esta zona trabajó por seos años corridos, hasta que en 2019 le agregaron también la zona serrana como un acuerdo en común con el entonces director General de SEECH, Manuel Arias Delgado, llegando a realizar eventos deportivos con más de mil estudiantes de su zona en una denominada “Mundialitos”.
A pesar de que no tenía quejas sobre sus labores y no se había registrado ningún incidente en los municipios donde estaba designado, en 2023 se le informó que las zonas bajo su supervisión serían reorganizadas. En consecuencia, le fueron retirados de su supervisión los municipios de Bocoyna y Urique, los cuales serían sustituidos por los municipios de Chínipas y Morelos.
Esta decisión dejó al maestro Vélez profundamente inconforme, pues asegura que durante aproximadamente 17 años, había trabajado incansablemente en Bocoyna y Urique, consolidando la labor de los profesores de educación física y organizando eventos deportivos de amplio reconocimiento tanto a nivel estatal como nacional. "Son municipios en los cuales he invertido gran parte de mi carrera, logrando un impacto significativo en la comunidad y en el desarrollo de programas deportivos", comentó Vélez.
El maestro Vélez expresó que este cambio no solo afectaba su trayectoria profesional, sino también las relaciones y proyectos que había establecido con las comunidades locales. "No es simplemente una cuestión de cambiar de lugar de trabajo; es un proceso que desarraiga años de esfuerzo, dedicación y compromiso con el desarrollo educativo y deportivo de estas zonas", añadió.
El docente también expresó que dichas actividades las realiza con la finalidad de integrar los municipios más apartados a la labor de fomentar el deporte en la niñez de la región serrana, logrando incluso reunir a mil estudiantes de educación básica.
Por ello, denunció a la jefa de Departamento de Educación Física, Cinthia Guadalupe Arenales Ramírez como la principal violentadora de sus derechos laborales y humanos, “con total dolo y flagrancia pretende adjudicar al nuevo supervisor, los municipios de Bocoyna y Urique para favorecer sus intereses y con ello perjudicarme en mis condiciones laborales y humanas”.
De acuerdo con el quejoso, Cinthia Arenales fue quien le notificó de manera verbal que ahora debe acudir a los municipios de Chínipas y Morelos, los cuales se encuentran alejados del centro de trabajo, estando a un promedio de 20 horas de la capital, lo que perjudica los tiempos del supervisor para cumplir con sus diligencias.
Asimismo, comentó que al no haber sido notificado por un documento oficial, estos trabajos que le piden que realicen en los municipios más alejados de la zona 36, que es en la que estuvo trabajando en los últimos años, es ilegal al ser infundado e inmotivado y contradictorio a los derechos laborales y humanos que lo asisten.
También mencionó el profesor que la división realizada por la maestra Cinthia pareciera estar realizada con total desconocimiento de la región, haciendo más complicado para el supervisor llegar a sus municipios designados.
Por todo lo anterior, Vélez ya ha impuesto al menos 2 amparos para que su caso sea revisado y que la orden de cambio de zona se le sea dado a través de la forma correcta, que es por medio de un documento formal, y se la hagan llegar de forma inmediata, o continuará tomando acciones legales en contra de las personas involucradas.