Totalmente llena y excediendo su capacidad lució la capilla del Santo Cristo de la Esperanza, durante las honras fúnebres en honor a doña Elia Delgado de Mares, en las instalaciones de Mausoleos Luz Eterna, a donde acudieron distinguidas personalidades de la sociedad chihuahuense a dar el último adiós a una dama ejemplar que dejó un gran legado de humanidad y amor por el prójimo con las obras que realizó a lo largo de su vida.

Sus restos mortales fueron contenidos en un ataúd de color dorado metálico, que estuvo al centro de la capilla durante la celebración religiosa, y que fue el depósito donde recibió el agua bendita y los aromas del incienso en una muy emotiva ceremonia religiosa.

En la capilla, pasillos y jardines de las instalaciones fue montado un importante operativo de vigilancia por parte de la seguridad personal de las personas que acudieron a dar el pésame a la familia Mares Delgado, y despedirse de doña Elia en su camino a la Casa del Padre. Descanse en paz, doña Elia Delgado de Mares.

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