La líder de El Barzón en Ciudad Juárez, Griselda Sosa, fue detenida durante la mañana del miércoles por personal del Gobierno Federal al irrumpir la rueda de prensa que celebra cada mañana el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, desde Palacio Nacional, en la Ciudad de México.
Griselda llegó desde muy temprana hora para protestar por los desalojos a los que han sido víctimas familias juarenses, por parte del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit).
Durante su protesta, fue sacada del recinto y llevada a una oficina donde permaneció incomunicada desde las 6:30 de la mañana, asegurándole su aparato celular, según informaron personas allegadas a la activista.
Arturo Hernández Vázquez, comunicador y amigo de Griselda Sosa, fue la única persona que se pudo comunicar con ella al momento de ser retenida por dos guardias de Palacio Nacional, poco antes de las 7:30 horas de la Ciudad de México.
Ella le comentó que había decidido asistir sola para reclamar la manera en que decenas de trabajadores son despojados de sus viviendas por dicha dependencia federal, al atrasarse en sus pagos por problemas familiares o falta de empleo.
A través de WhatsApp dio aviso de cómo habían ocurrido las cosas y minutos más tarde envió un mensaje donde alertaba que le quitarían su celular, para posteriormente perder toda comunicación con la barzonista.
Fue hasta poco antes de las 12:00 del mediodía que Griselda recuperó su libertad y pudo comunicarse con amigos y familiares, para explicarles qué lo ocurrió, aclarando que por fortuna no pasó a mayores.
En entrevista, recalcó que había decidido acudir a Palacio Nacional para pedirle ayuda a Andrés Manuel, ya que ni en Ciudad Juárez ni en Chihuahua han podido resolver la petición de ayudar y proteger a más de 20 familias que se han quedado sin vivienda.
Recalcó que aún y cuando AMLO dio la orden de ya no despojar a las familias mexicanas de sus viviendas, el Infonavit ha hecho caso omiso y siguen dejando en las calles a los juarenses, en contubernio con grandes empresas inmobiliarias que compran las casas a precios irrisorios para posteriormente rematarlas.
Sin embargo, recalcó que la directora general de Gobierno, Leticia Ramírez Amaya, le prometió una reunión con el presidente de la República y con el titular del Infonavit, Carlos Martínez Velázquez, para tratar esta difícil problemática.
De negársele la anuencia, prometió que seguiría con las protestas y haría un plantón al exterior de Palacio Nacional, con la intención de presionar a las autoridades y así “se dignen a escucharla”.
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