Decenas de migrantes centroamericanos cruzaron el Río Bravo para después entregarse a los agentes de la Patrulla Fronteriza.
Esto ocurrió a la altura del Puente Negro, y de acuerdo a testigos, las personas llegaron en camionetas, que después de bajarlos, se retiraron inmediatamente del lugar.
Al momento de cruzar, se acercaron dos camionetas de la Border Patrol para indicarles que se pusieran en hilera, esto mientras esperaban el refuerzo de más agentes.
Esta es una práctica que se vive diariamente en la frontera, sobre todo ante la reactivación del Protocolo de Protección a Migrantes, sin embargo, la mayoría de ellos son retornados por las autoridades estadounidenses bajo el Título 42.
“Desafortunadamente cruzar de forma irregular es garantía de que vas a poder ser procesado bajo los procedimientos regulares, como el MPP, que se instalaron antes de la pandemia”, señaló Irving Palacios, asistente de Protección en la Organización Internacional para las Migraciones en Ciudad Juárez.