Gerardo, Tomás, Karina, Maricruz, Esperanza, Marcela, Lilia, Antonieta, María, Olga, María Guadalupe, Juanita, Mónica, Sofía, Alicia, Marisela, María Isabel, Elvira, Nancy… Son algunos de los nombres de quienes con amor, dedicación y paciencia se han sumado al combate del Covid-19, apoyados de sus habilidades.
No es personal de salud, son voluntarios, trabajadores y socio-alumnos del Centro de Seguridad Social (CSS) del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en la ciudad Chihuahua, mejor conocido por la población como “La Asegurada”.
Todos ellos, con vocación, aportan su tiempo y esfuerzo para elaborar cubrebocas que se obsequian a los trabajadores de áreas administrativas y derechohabientes que acuden a las unidades médicas y hospitalarias del Instituto, en esta capital.
El titular de la Jefatura de Salud en el Trabajo, Prestaciones Económicas y Sociales de la Oficina de Representación Chihuahua del IMSS, José de la Luz Chacón, destacó que se trata de un verdadero acto de solidaridad que se reconoce y valora.
Indicó que la elaboración de los cubrebocas se lleva a cabo en los domicilios de los voluntarios y otros más, en los talleres de costura del CSS, cuyas clases en estos momentos están suspendidas por la emergencia sanitaria.
“Esta es una noble acción, que refleja el interés que tienen los socio-alumnos, voluntarios y trabajadores del Centro de Seguridad Social por coadyuvar con el IMSS en el combate y atención del Covid-19, lo cual reconocemos ampliamente”, concluyó.
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