Una despachadora de la gasolinera ubicada por el kilómetro 7 de la carretera Chihuahua-Cuauhtémoc, desafiando el peligro, habla por teléfono celular mientras carga combustible a un camión.
A pesar de las señalizaciones que indican la prohibición de uso de celular, que está justo a un lado de ella, la empleada de la gasolinera hace caso omiso, poniendo en peligro no sólo a ella, sino cualquiera que se encuentre cerca.
La denuncia la hizo uno de los clientes que acudió a cargar gasolina, preocupado por su seguridad y la de otros usuarios del servicio.
Las autoridades de seguridad recomiendan no encender ni contestar al teléfono celular mientras se encuentre en una estación de servicio, debido al riesgo de ignición cerca de vapores inflamables.
Sin embargo al ser cuestionada la dama se molestó por la recomendación de colgar el teléfono, arguyendo que estaba resolviendo un problema.