En el estado de Chihuahua, en un periodo de cinco años, al menos han sido detenidos 301 elementos de seguridad por haber cometido el delito de violencia familiar, que es el principal que cometen los uniformados, de acuerdo a las estadísticas que concentra la Dirección de Estadística Criminal de la Fiscalía General del Estado.
Al año, en promedio, son detenidos entre 36 a 90 elementos por cometer este delito, el cual encabeza el listado de los principales que cometen los agentes de seguridad, ya que corresponden al 46.48% de las detenciones en contra de uniformados, seguido por daños, lesiones y robos.
De acuerdo a las estadísticas que concentra la dependencia estatal, en 2016 fueron detenidos 86 elementos; en 2017 fueron 52; 34 en 2018; 49 en 2019; 54 en 2020 y 26 en lo que va del mes de junio, lo que mantiene este delito en una constante que cometen los uniformados tanto de la Comisión Estatal de Seguridad como de la Fiscalía General del Estado.
En cinco años (2016 a mayo del 2021) se ha detenido a 914 elementos de seguridad por 14 delitos, entre los que se encuentra la violencia familiar, robo, homicidio, abuso, extorsión, violación entre otros más, y se mantiene un promedio de entre 170 a 180 detenciones de agentes que comenten diversos delitos.
Los municipios que concentran la mayoría de los casos y por ende hubo mayor detención de elementos de seguridad, fue en Juárez, seguido por Chihuahua, Parral, Delicias, Madera y Matamoros, que encabezan las primeras posiciones con mayor incidencia, según las cifras de la Fiscalía General del Estado.
A pesar de la estadística, existen muchos casos de violencia entre parejas de elementos de seguridad que no se inician como violencia familiar, pues terminan en trágicos finales como son el homicidio, privaciones de la libertad, entre otros delitos que se configuran en otros casos que requieren de mayor investigación y elementos.
El día domingo 27 de junio, un agente de la Fiscalía Especializada de la Mujer decidió abrir fuego en contra de su pareja sentimental, a quien le disparó en por lo menos cinco ocasiones, para después arrebatarse la vida con dos impactos de bala, de acuerdo a los reportes oficiales.
El agente identificado como Anselmo ya contaba con algunas denuncias en la Fiscalía General del Estado por violencia familiar, por lo cual había sido desarmado tiempo atrás, pero luego de ser adscrito a la seguridad de un comandante le entregaron su arma y generó el ataque en contra de su pareja sentimental.