¿De cuánta agua disponemos? Es una pregunta que se hace hoy día en todos los foros mundiales del agua y el tema central de la conferencia “Aguas subterráneas de Chihuahua” y del libro “Aguas nacionales y los acuíferos de Chihuahua”, de Kamel Athié y Melchor Alberto López Ortiz (+), que se presentó este jueves a través de zoom.
Del total de agua de este planeta azul, el 97.5 es salada y sólo el 2.5% es dulce. De esta, el 70% está en estado sólido en ambos polos, por lo que sólo disponemos del 1% para todos los usos a nivel mundial y el 30% de esta es subterránea.
De acuerdo con Athié, expertos en el ciclo hidrológico han concluido que la oferta de agua es la misma desde los orígenes del hombre.
“La naturaleza nos regresa la misma cantidad de agua cada año. Ahora por el calentamiento global, de diferentes formas, porque se ha perturbado el ciclo hidrológico, lo que ya no es lo mismo es la demanda”, dijo.
En este sentido, señaló que cuando apareció el hombre neandertal o el homo sapiens había mucha agua para pocos habitantes, “pero hoy somos 7 mil 500 millones de habitantes y en el 2030 serán 8 mil 200 millones. Hay crecimiento poblacional, demanda de agua para subsistir”.
Por otro lado, el cambio climático está imponiendo una serie de condiciones que reducen la disponibilidad de agua/año por habitante, que en 1950 era de 18 mil metros cúbicos, hoy es nada más de 2 mil 800.
Esto da una idea de cómo la oferta es la misma desde los orígenes del hombre, pero la disponibilidad no es la misma por diferentes razones: la contaminación, el derroche, el desperdicio.
Los 61 acuíferos que tenemos en Chihuahua tardaron millones de años en formarse, así como en captar y almacenar el agua. Y de 1990 para acá empezamos a dar cuenta de ellos por la actividad económica, lo cual es muy bueno.
Primer lugar en manzana, nuez, durazno, chile, cebolla, los productos agroalimentarios chihuahuenses están entre los 20 principales a nivel nacional. En exportación de becerros también primer lugar, producción de leche cuarto lugar nacional.
“Somos una potencia agroalimentaria en base al agua subterránea y también la superficial. Nada más que del agua superficial son 200 mil hectáreas, contra 700 mil en total, 500 mil son aguas subterráneas”, explicó.
“Con ello, en unos años más estaremos sin duda entrando en conflictos en los usos del agua, donde podríamos decir que está compitiendo el agua de la agricultura con el agua para el consumo humano”, advirtió.
Este caso se presenta en la ciudad de Chihuahua, como en otras partes del país y en otros municipios, en Jiménez, Cuauhtémoc. Y en estas poblaciones la gente no tiene agua las 24 horas, sobre todo de buena calidad.