Una intervención de más de 4 horas bastó para que el joven chihuahuense Adrián Jurado Espino, de 23 años de edad, se deshiciera del tumor facial que había cargado por años. Fueron 3 kilos 500 gramos los que retiraron.
“Me dicen que le quitaron todo el tumor a mi hijo”, fue el primer comentario de don Adrián Jurado Leos, padre del joven quien corrió a sexto piso del Hospital General “Dr. Manuel Gea González” para ver con sus propios ojos el “milagro” de manos mexicanas, quienes en un trabajo en equipo lograron resecar en su totalidad la displasia fibrosa poliostótica que desfiguraba su rostro.
A las 08:00 horas, Adrián fue conducido a quirófano para prepararlo, pues a las 09:00 horas comenzó el procedimiento, por el cual había esperado más de dos años. Su intervención número 14 fue todo un éxito. La conjunción de varias especialidades lideradas por la cirujana plástica Laura Andrade Delgado fue un factor determinante para que Adrián saliera victorioso de esta intervención que le devolverá su fisonomía.
La cirugía no presentó complicaciones ni contratiempos, no requirió la embolización del tumor, razón por la cual se pudo extirpar por completo.
“Me dice la doctora que no va a requerir estar en terapia intensiva, que en unas horas pasará a piso”, comentó el padre del joven, luego de que la doctora le informó que Adrián estaba en el área de recuperación, despierto y sin dolor.
Adrián permaneció por unas horas en recuperación, luego lo trasladaron a su habitación, donde permanecerá unos días.
El día de hoy les informarán sobre la acciones a seguir y cuántos días permanecerá hospitalizado. “Esto ya pasó a Dios gracias está bien, la libró de nuevo”, comentó don Adrián, quien estaba más tranquilo y emocionado, pues por fin Adrián podrá tener una vida normal y retomar sus estudios de ingeniería en la Universidad Autónoma de Chihuahua.
El padre relató que los tres días anteriores a la cirugía fueron de mucho estrés para el joven chihuahuense, pues desde el lunes le hicieron una traqueotomía y no podía hablar. El miércoles en la noche, estaba muy indeciso, no durmió bien porque tenía miedo, ya ayer en la mañana estaba resignado para enfrentar la lucha contra el tumor.
“Agradezco a todos los que nos han ayudado y siguen apoyando, a quienes con su habilidad y conocimiento hicieron posible que Adrián pudiera ser operado y a los médicos que se encargaron de darle una esperanza de una mejor vida a mi hijo”, dijo el padre.
Aún hay que pagar la cuenta del hospital, si desea ayudar puede depositar a la cuenta Bancomer 4152313324965461 a nombre de Adrián Jurado Espino.