La Fiscalía General del Estado obtuvo tres órdenes deaprehensión contra los presuntos asesinos de la periodistaMiroslava Breach, se trata de integrantes de una célula delcártel de Sinaloa ubicada entre los municipios de Uruachi yChínipas, pero no las ha ejecutado debido a que el territorio esinaccesible.
De manera oficial la FGE anunció que no revelará detalles dela investigación y de los presuntos responsables, pero pudoconfirmarse que las órdenes de aprehensión ya fueron obsequiadashace algunas semanas contra los integrantes de la banda conocidacomo Los Salazar, que encabeza Crispín Salazar Zamorano, la cualcolabora con el grupo criminal denominado Gente Nueva.
También pudo confirmarse que de acuerdo con la investigaciónestatal, quien ordenó el asesinato de Miroslava fue CrispínSalazar Zamorano, cuyo grupo colabora con otra célula más grandedenominada “Gente Nueva”, brazo armado del cártel deSinaloa.
Salazar Zamorano aparece como responsable de haber instruido lamuerte de la periodista, mientras que un sobrino y otra persona,estos no identificados oficialmente, aparecen como autoresmateriales del asesinato ocurrido el pasado 23 de marzo del año encurso.
Luego de meses de investigación, se determinó que este grupofue el que instruyó la muerte de la periodista por manejarinformación y detalles comprometedores como nombres de loslíderes, relacionada la operación de la Gente Nueva y Los Salazaren Chínipas.
Este mismo grupo, según el reporte de la investigación queoficialmente no ha sido dado a conocer, intentó que el crimen sele adjudicara a Arturo Quintana Quintana, alias El Ochenta, jefedel grupo criminal “Nuevo Cártel de Juárez” en la zonaoccidente de Chihuahua, con el intento de desviar las pesquisas.Este intento se hizo con mensajes en mantas y cartulinas dejadasentre el día del crimen y horas después, en los que se vinculabaal homicidio del líder delincuencial de un grupo contrario al de“Gente Nueva”, con el que colaboran Los Salazar.
La hipótesis se descartó totalmente al ser identificados LosSalazar mediante evidencia gráfica, registros vehiculares,telefónicos y de computadoras en una vivienda cateada de lacolonia Revolución, donde presumiblemente se planeó elhomicidio.
Fue gracias a la evidencia lograda que el Ministerio Públicosolicitó a un juez de Control del Distrito Judicial Morelos lascorrespondientes órdenes de aprehensión, ya libradas.
Sin embargo, según reportes internos de la FGE, no se hanejecutado dichas órdenes debido a que la información que se tienede los implicados, se escoden junto con su grupo delincuencial enla sierra, en los límites entre Chínipas y Uruachi, pero en unaregión donde no hay acceso vía terrestre.