Luego de horas de trabajo continuo, la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas (SCOP) ha logrado abrir uno de los carriles de la carretera Samachique-Batopilas, la cual había sido bloqueada por deslaves de cerros a causa de las intensas lluvias del pasado fin de semana.
Tres equipos de maquinaria pesada han trabajado arduamente para retirar una gran cantidad de rocas y tierra que impedían el paso de vehículos en varios tramos de la carretera.
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Aunque el tránsito ha sido restablecido parcialmente, las autoridades han emitido un llamado a los conductores para que transiten con precaución, debido a que los trabajos de remoción de escombros continuarán durante los próximos días.
Los trabajos de limpieza, realizados por la SCOP en colaboración con el municipio de Batopilas, incluyeron la remoción de rocas que alcanzaban alturas de entre 5 y 6 metros. Estas rocas se desprendieron de los cerros debido a la fuerte precipitación, creando un riesgo significativo para quienes transitan por la zona.
Los tramos federales de la carretera fueron los más afectados por los deslaves, con bloqueos que han requerido un esfuerzo significativo para ser despejados. A pesar de los avances, se prevé que las labores de limpieza y rehabilitación de la carretera se extiendan por varias semanas más, dada la magnitud de los daños.
El Gobierno del Estado de Chihuahua ha exhortado a los residentes y visitantes a extremar precauciones al transitar por la carretera Samachique-Batopilas. Se recomienda mantenerse informados sobre el progreso de los trabajos y las condiciones de la carretera, ya que aún quedan importantes cantidades de material por remover.
Además de los esfuerzos de limpieza, las autoridades están evaluando la implementación de medidas preventivas adicionales para minimizar el riesgo de futuros deslaves en esta área. Estas medidas podrían incluir la instalación de barreras de contención y la mejora de los sistemas de drenaje para manejar mejor el flujo de agua durante fuertes lluvias.
La reapertura parcial de la carretera es un alivio para las comunidades locales y los viajeros que dependen de esta ruta, pero la situación subraya la vulnerabilidad de la infraestructura vial en regiones montañosas ante eventos climáticos extremos. Las autoridades continuarán monitoreando la situación y trabajando para garantizar la seguridad y accesibilidad de esta importante vía de comunicación.