La localidad de Baborigame se encuentra en el Triángulo Dorado, dentro del municipio de Guadalupe y Calvo, en la parte más remota de la Sierra Tarahumara, pues su única vía de comunicación es un camino de terracería que conecta con la Carretera Federal 24.
Este lugar es conocido por su belleza natural, pero también por su aislamiento, pues se ha visto azotado por la violencia, provocando el desplazamiento forzado de sus habitantes.
Lee también: Desplazados por violencia ven en Baborigame una zona de refugio seguro
Fundación de Baborigame
La localidad de Baborigame se fundó el 3 de agosto de 1708 como una misión para evangelizar a los indígenas tepehuanes que vivían en la zona, bajo la dirección del jesuita Tomás de Guadalajara, quien también fundó otras misiones en esa región. Esto se realizó con la autorización del capitán general de la Nueva Vizcaya, Juan Fernández de Córdoba. En 1843, se descubrieron minas en sus alrededores.
Baborigame se ubica en el extremo sur del estado de Chihuahua, es una de las localidades más remotas de la región y se encuentra a una altitud de 1,978 metros sobre el nivel del mar. Esta ubicación privilegiada ofrece paisajes impresionantes y un clima único que atrae a los amantes de la naturaleza y la aventura.
El acceso a Baborigame es limitado, ya que su única vía de comunicación es un camino de terracería que conecta con la Carretera Federal 24. Esta carretera es crucial para la comunidad, ya que hacia el sur lleva a Guadalupe y Calvo, y hacia el norte a Hidalgo del Parral. La falta de infraestructura moderna hace que el viaje a Baborigame sea una verdadera aventura, ideal para aquellos que buscan desconectarse del bullicio urbano.
Según el Censo de Población y Vivienda de 2010 realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), Baborigame cuenta con una población de 2,854 habitantes. Esta comunidad, aunque pequeña, es rica en cultura y tradiciones, reflejando la diversidad y el espíritu resiliente de sus habitantes.
La violencia azota a Baborigame
Durante muchos años, esta comunidad destacó por la producción de marihuana y amapola, pues el aislamiento, la falta de infraestructura y el abandono de las autoridades, llevaron a muchos de sus habitantes a dedicarse al cultivo y procesamiento de estas plantas para sobrevivir. Sin embargo, la legalización de la marihuana y el auge de las drogas sintéticas provocaron una caída en los precios de la marihuana y la amapola, generando desempleo y afectando gravemente la economía local.
Te puede interesar: Mantienen Células BOI operativos de disuasión en Baborigame
Con la llegada de sicarios del Cártel Jalisco Nueva Generación, la violencia se intensificó, especialmente contra las poblaciones que alguna vez apoyaron al Cártel de Sinaloa. La inseguridad había mantenido aislada a Baborigame durante aproximadamente cinco años, y el secuestro del padre Antonio Salazar marcó el punto máximo de esta crisis de seguridad.
Por otro lado, Baborigame se ha convertido en un refugio para las familias desplazadas por la violencia en el municipio de Guadalupe y Calvo, según Juan Portillo, visitador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos. La presencia de la Guardia Nacional y el Ejército, que mantienen la vigilancia en la zona, es uno de los principales motivos por los que las personas buscan seguridad aquí. Sin embargo, a pesar de la presencia policial, se han registrado enfrentamientos armados entre grupos delictivos en áreas colindantes de la Sierra Tarahumara, lo que sigue generando preocupación en la comunidad, lo que las ha llevado a huir también de Baborigame.
En lo que va del año, esta comunidad ha enfrentado al menos seis homicidios y varios enfrentamientos armados. Esta situación ha obligado a muchas familias a buscar un lugar seguro lejos del crimen organizado, debido a las constantes amenazas que han recibido.