Cuauhtémoc, Chih.- 300 mil bombas de vida serán esparcidas el domingo en San Juanito, Bocoyna, con el apoyo de pobladores de la zona y de personas de Cuauhtémoc que viajarán hasta aquel punto, con el objetivo de cubrir 400 hectáreas que sufrieron deforestación a causa de la tala clandestina.
Así lo informó la activista Karina Gómez, quien comentó que finalmente se descartó el utilizar avionetas para el proyecto, y se optó por incluir a la gente porque se ha generado gran interés en ayudar a salvar la Sierra Tarahumara.
En un inicio se fabricaron 232 mil bolas de arcilla con semillas de pino, de las cuales 70 mil se llevaron a Las Canoas, en el municipio de Carichí, una zona muy afectada por incendios forestales.
Se anunció que el resto serían precisamente para Bocoyna, sin embargo se completaron las 300 mil, y el domingo trasladarán desde Cuauhtémoc a las personas que deseen participar en los recorridos en la zona seleccionada.
Este proyecto denominado Neja Rakála, que traducido del rarámuri significa “dar semilla”, ha contado con el apoyo de Grupo La Norteñita, quien ha facilitado su personal, instalaciones e incluso transporte, para hacerlo posible.
El 15 de agosto, a las 8:00 horas, se está citando a los interesados en acudir a Zateapachic, a la altura del kilómetro 80 de la carretera a San Juanito. Se solicita apartar el lugar enviando un WhatsApp al número 625 133 1155.
Karina Gómez comentó que a diferencia de Las Canoas, en Zateapachic es una superficie plana que facilitará a las personas el caminar para esparcir las bombas de vida sobre la superficie.
Se manifestó optimista de que las 300 mil quedarán repartidas en un solo día, pues informó que la actividad se incluyó en la Feria del Hongo que se lleva a cabo en este momento en San Juanito, y los pobladores participarán en la reforestación.