Cientos de habitantes de Baborigame salieron a las calles para alzar la voz solicitando paz en la Sierra Tarahumara. Ante la violencia que se vive en parte de este sector y de la cabecera municipal de Guadalupe y Calvo que ocasiona el desplazamiento de varias familias, decenas de niños, niñas y adultos salieron de sus casas con pancartas pidiendo que acabe la ola de crímenes en el lugar. Esta localidad ha sido testigo de al menos seis homicidios en lo que va del año, enfrentamientos armados y refugio de familias desplazadas por la violencia.
Te puede interesar: Carecen autoridades de una cifra real de desplazados de la Sierra: Colectivo Nuevo Amanecer
Pobladores de la comunidad de Baborigame en Guadalupe y Calvo, Chihuahua recorrieron las diversas calles del lugar con el objetivo de alzar la voz y poner un alto a la ola de violencia que se vive en dicho sector y que ha ocasionado el desplazamiento de varias familias.
Según dio a conocer un habitante de esta comunidad, quien por cuestiones de seguridad decidió omitir su nombre, ante la ola de diversos crímenes que se ha estado registrando en esta parte de la Sierra Tarahumara, es que los habitantes en compañía de sus hijos e hijas decidieron manifestarse en favor de la paz.
➡️ Únete al canal de WhatsApp de El Heraldo de Chihuahua
Señaló que pese a la presencia de autoridades policíacas, el crimen organizado no se detiene, puesto que buscan reclutar personas, para lo cual, amenazan a las familias, lo que impide que vivan en paz.
Destacó que los habitantes están cansados de que haya tantos crímenes y violencia tanto en el lugar como en la cabecera municipal y otras zonas aledañas a la población, situación que ha ocasionado el desplazamiento de familias, buscando un refugio seguro que los mantenga alejados del crimen organizado, ya que han sido víctimas de amenazas.
Señaló que, pese a la presencia de autoridades policíacas, el crimen organizado no se detiene, puesto que buscan reclutar personas, para lo cual, amenazan a las familias, lo que impide que vivan en paz.
Fue por ello que, de manera pacífica, alzaron la voz utilizando pancartas con mensajes alusivos de "Todos somos Baborigame", "Queremos Paz con Justicia y Dignidad", "No más Muertes, el perdón lleva a la Paz", entre otros escritos en los que solicitan que se detenga la ola de crímenes.
Señaló que, pese a la presencia de autoridades policíacas, el crimen organizado no se detiene, puesto que buscan reclutar personas, para lo cual, amenazan a las familias, lo que impide que vivan en paz.
Fue por ello que, de manera pacífica, alzaron la voz utilizando pancartas con mensajes alusivos de "Todos somos Baborigame", "Queremos Paz con Justicia y Dignidad", "No más Muertes, el perdón lleva a la Paz", entre otros escritos en los que solicitan que se detenga la ola de crímenes.
Sin embargo y pese a la presencia de autoridades policiacas, se han llevado a cabo diversos enfrentamientos armados por parte de grupos delictivos antagónicos en partes de la Sierra Tarahumara que si bien, no son directamente en Baborigame, si son colindantes con este sector.
Fue el pasado mes de abril, cuando pobladores de las localidades de Los Otates y La Huerta de Guadalupe y Calvo, ubicado a poco más de dos horas de Baborigame, reportaron diversos enfrentamientos armados que tuvieron una duración de aproximadamente 10 horas.
En el mes de febrero, una persona calcinada al interior de un vehículo, otro más con lesiones por disparos de arma de fuego y un ataúd abandonado en la escena, fue el saldo de un enfrentamiento armado ocurrido en el camino que conduce de Baborigame a San Juan Nepomuceno, en el municipio de Guadalupe y Calvo.
En dicha ocasión, en primera instancia, los elementos de la Guardia Nacional, Secretaría de la Defensa Nacional y la Secretaría de Seguridad Pública Estatal ubicaron una camioneta totalmente calcinada, sin embargo, al inspeccionar la misma, encontraron el cuerpo de una persona, el cual quedó reducido a cenizas.
Así mismo, se localizó una camioneta de color guinda de la línea Cherokee, misma en la que se presume, viajaban algunos participantes de los hechos y que posteriormente, emprendieron la huida a bordo de otras unidades.
Los occisos fueron identificados como Antonio Abel Carrillo Julián, de 28 años de edad, con domicilio conocido en Rancho Amador seccional de Baborigame en Guadalupe y Calvo, tenía heridas producidas por proyectil de arma de fuego en región pectoral.
También Alejandro Carrillo Carrillo de 35 años de edad, con domicilio conocido en Rancho Amador seccional de Baborigame en Guadalupe y Calvo, presentó heridas producidas por proyectil de arma de fuego en tórax posterior.
En la escena fueron localizados un casquillo calibre 7.62 x 39 milímetros, dos casquillos calibre .223 milímetros y un cartucho calibre .223 milímetros.