El hermano del contador del menonita Abraham Harms, Noé M. G., fue el responsable de entregar toda la información, cuentas y demás datos para el equipo de delincuentes que radica en la Ciudad de México y que decidieron matarlo el pasado 24 de junio, dentro de una “casa de seguridad” ubicada en la colonia San Cristóbal.
Jorge M. G. es un contador público que radica en la ciudad de Cuauhtémoc, reconocido por manejar las cuentas de varios de los menonitas que radican en aquella zona del estado, y a quien Noé M. G. (su hermano, ya detenido) robaba toda la información y la entregaba a un grupo delincuencial para cometer secuestros y extorsiones.
Según los informes que ha concentrado la Fiscalía General del Estado, Noé M. y otra persona que hasta el momento no ha trascendido su identidad, eran el enlace en Chihuahua, con los secuestradores que tienen conformado un grupo en la Ciudad de México, donde recibían grandes pagos por la información que entregara a este grupo delincuencial.
Varios menonitas tienen la confianza para que el contador público Jorge les administre sus empresas y realice las cuentas y/o movimientos de los mismos, y su hermano (Noé) es quien tomaba la información que recababa Jorge para entregarla a este grupo de delincuentes que viajaba desde la Ciudad de México a Cuauhtémoc para cometer diferentes delitos en contra de estas personas.
Se desconoce si la información que compartían se realizaba de manera consensada o la forma en la que Noé la obtenía, sin embargo, una pieza fundamental para obtener estos números y cuentas bancarias era Jorge, quien manejaba sus empresas y sobre todo el dinero que los menonitas empresarios generan.
A este grupo criminal se le relaciona en por lo menos cuatro eventos tocantes a la comunidad menonita de Cuauhtémoc, donde sólo el año pasado un empresario menonita fue secuestrado y al momento de intervenir las autoridades tuvieron que cerrar la negociación en la Ciudad de México, donde radica esta banda criminal, para hacer entrega del dinero.
Información que ha concentrado la Unidad de Secuestros de la Fiscalía General del Estado establece que se trata de un grupo de aproximadamente siete integrantes, de los cuales cuatro o tres son los que viajan de México a Chihuahua para cometer estos atracos y secuestros para obtener información, mercancía, dinero y diferentes cosas más.
Mientras que el resto de la banda se mantiene en su centro de operaciones, donde buscan más estados y víctimas a quienes poder robar su dinero o seguir obteniendo diferentes intereses, ya que no son perseguidos por ninguna autoridad, hasta que la Fiscalía de Chihuahua comenzó a seguirles la pista.
Todos los integrantes de esta banda, o la mayoría de los que han logrado identificar, ya cuentan con orden de aprehensión en su contra, por lo cual podrían ser detenidos como sucedió con el responsable de “poner” a Abraham Harms, quien ya fue presentado a ante un juez de Control para que le formulara cargos en la ciudad de Cuauhtémoc.
Se conoció que el imputado planeó el ilícito y para ello envió dinero a sus cómplices en la Ciudad de México para que se trasladaran a Chihuahua y llevaran a cabo la privación de la libertad de la víctima, y el objetivo era obtener el pago de un rescate, pues conocían de sus actividades económicas.
El día de la privación de la libertad la víctima se había quedado de ver con el imputado en un restaurante para desayunar, al cual nunca llegó, sin embargo, arribaron los secuestradores que lo golpearon y lo subieron por la fuerza a su vehículo.
Con dicha información, el 25 de junio policías antisecuestros iniciaron un operativo de vigilancia a discreción y observaron actividad sospechosa del imputado, quien aproximadamente a las 21:50 horas salió de su domicilio ubicado en el kilómetro 17 de la carretera Cuauhtémoc a Álvaro Obregón y a bordo de un vehículo Chevrolet Sonic con placas del Estado de México se dirigió a un domicilio ubicado en la calle San Andrés número 2094 en la ciudad de Cuauhtémoc.
En dicho lugar fue sorprendido por elementos de la Unidad Modelo de Atención al delito de Secuestro resguardando el cuerpo sin vida de la víctima, el cual lo tenía en el segundo piso de la construcción atado de pies y manos y con un disparo en la frente, así como diversos golpes.
El 28 de junio, la unidad de Atención al Delito de Secuestro presentó ante una juez de Control argumentos incriminatorios en contra del imputado de nombre Noé M. G., y/o Noé Jafet M. R., por secuestro agravado en su modalidad de privación con el propósito de hacer daño, homicidio calificado y portación de arma de fuego en perjuicio de un miembro de la comunidad menonita.
Se conoció que el imputado planeó el ilícito y para ello les envió dinero a sus cómplices del Estado de México para que se trasladaran a Chihuahua y el día de la privación de la libertad, la víctima se había quedado de ver con el imputado en un restaurante para desayunar al cual nunca llegó.
Al término de la audiencia que concluyó a las 21:30 horas, la juez de Control impuso medidas cautelares de prisión preventiva al imputado.
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