Un total de 30 mil 591 chihuahuenses padece obesidad, la mayoría se encuentra en el rango de los 25 a 44 años, seguido del grupo de 50 a 59 años y en tercer sitio de 45 a 49 años, es decir, en edad productiva; la principal causa es la ingesta de comida chatarra, alimentos altos en grasas y azúcares, y la nula o poca activación física lo que conlleva a padecimientos crónicos como enfermedades cardiacas y diabetes, dos de las principales causas de mortalidad.

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Actualmente 7 de cada 10 personas padecen sobrepeso y obesidad, pero la tendencia marca que para el cierre de 2020 serán 9 de cada 10 personas, por lo que se incrementará la demanda de servicios médicos correctivos.

La obesidad es una enfermedad de pies a cabeza, constituyen un grave problema de salud en el estado; padecerlo eleva el riesgo de enfermedades como diabetes tipo 2, hipertensión, dislipidemia (niveles altos de colesterol), entre otros.

La Secretaría de Salud estima que el costo total de la obesidad en 2017 fue de 240 mil millones de pesos y seguirá́ aumentando hasta alcanzar los 272 mil millones en 2023, un aumento de 13% en seis años.

De acuerdo con un estudio realizado por el Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO), se calculó que los costos totales solamente de la diabetes asociados a la obesidad en 2013 ascendieron a 85 mil millones de pesos al año, de los cuales 73% corresponde a gastos para tratamiento médico, 15% al costo generado por pérdidas debido al ausentismo laboral, y 12% al costo por pérdidas de ingreso debido a mortalidad prematura.

La Subdirección de Epidemiología de la Secretaría de Salud en el registro de mortalidad 2019 se asienta que 32 personas fallecieron por la obesidad, además 8 fallecieron a consecuencia de la obesidad extrema y 4 por obesidad debida al exceso de calorías. En total son 44 personas, sin embargo las complicaciones suman más.

El grupo de 25 a 44 años es el más afectado con 10 mil 747 personas atendidas, sin embargo hay muchas personas que no consideran estar enfermos por lo que no se acercan a los servicios de salud; le sigue el grupo de 50 a 59 años con 5 mil 034 chihuahuenses; y en tercer sitio se ubica el grupo de 45 a 49 años con 3 mil 847 casos. Con base en los datos a partir de los 5 años empieza a incrementarse el número de personas con obesidad y sobrepeso.

La diabetes mellitus tipo 2 cobró la vida de mil 600 personas, de las cuales 660 con complicaciones múltiples y 309 con complicaciones renales, 25 personas más con cetoacidosis y 37 más con coma. La diabetes es un grupo de enfermedades que se caracteriza por los altos niveles de glucosa en la sangre causados por defectos en la producción de insulina, en la acción de la insulina, o en ambas. La diabetes puede provocar graves complicaciones y muerte prematura, pero las personas con diabetes pueden tomar medidas para controlar la enfermedad y disminuir el riesgo de sufrir complicaciones.

La obesidad es una enfermedad multifactorial que involucra factores como el neuroconductual, genética, ambiental, inmune, endocrina, y factores médicos. Es considerada la pandemia del Siglo XX, entre sus principales causas se encuentra la mala alimentación, el sedentarismo, el no contar con acceso a alimentos nutritivos, la ingesta de comida en abundancia y la comida chatarra o rápida.

La Organización Mundial de la Salud, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y la World Federation (WOF) han identificado que la epidemia de sobrepeso y obesidad no sólo resulta de los malos hábitos individuales, sino que es, principalmente, el resultado dedicado un entorno que promueve la obesidad, denominado ambiente obesogénico caracterizado por la multimillonaria publicidad de alimentos ultraprocesados altos en azúcares, grasas y sodio, así como la gran asequibilidad de estos productos y la ausencia de etiquetados nutrimentales.
El problema se ha incrementado, pues de ocupar la cuarta posición, actualmente México se encuentra en el nada honroso segundo lugar, sólo por debajo de Estados Unidos de Norteamérica. Chihuahua ocupa el primer lugar en el ámbito nacional en obesidad infantil, además de que en Ciudad Juárez el problema se incrementa al ser frontera e imitar los malos hábitos del país vecino, de acuerdo con la experiencia del doctor Óscar Ortiz Ruvalcaba, de Orma Med International Surgical Services.

De acuerdo con criterios establecidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS), se considera que una persona tiene sobrepeso cuando su IMC está entre 25.0 y 29.9; se considera obesidad grado I cuando el IMC está entre 30.0 y 34.9; obesidad grado II cuando el IMC está entre 35.0 y 39.9, y obesidad grado III cuando el IMC es igual o mayor a 40. Así que la mejor recomendación es checarse y medirse para que tome las acciones necesarias para cuidar su salud y preservar su vida.

OBESIDAD INFANTIL

Los malos hábitos han ocasionado que los niños sean víctimas potenciales de esta epidemia, en Chihuahua la obesidad infantil ocupa los primeros lugares en incidencia. Ello ocasiona que cada vez sea más frecuente que niños y niñas padezcan diabetes tipo 2, la cual antes estaba asociada sólo a los adultos.

Según datos de la Secretaría de Salud en los últimos 10 años el sobrepeso y la obesidad infantil han crecido hasta un 60% debido a que los pequeños registran alteraciones genéticas. El registro epidemiológico asienta que 145 niñas y niños menores de 1 años padecen obesidad, de 1 a 4 años se han detectado 399 casos y de 5 a 9 años mil 042.

Unicef destaca que 1 de cada 20 niñas y niños menores de 5 años y 1 de cada 3 entre los 6 y 19 años padece sobrepeso u obesidad. Esto coloca a México entre los primeros lugares en obesidad infantil en el mundo, problema que se presenta más a menudo en los estados del norte y en comunidades urbanas.
Aunque se estableció la Estrategia Nacional para la Prevención y el Control del Sobrepeso, la Obesidad y la Diabetes (ENSOD), emitida por el Gobierno en octubre de 2013, no existe una ley que regule las acciones de la estrategia, pues en las escuelas se estableció que no debían vender alimentos chatarra, pero poco se cumple.
El trastorno ha detonado el surgimiento de diversas enfermedades que antes sólo se veían en la población adulta como la hipertensión, la diabetes, el colesterol alto, los triglicéridos y el ácido úrico.

En obesidad infantil, el principal factor detonante de este padecimiento en niños de 10 a 17 años de edad, ya que en la pubertad y la adolescencia se presentan cambios hormonales que implican alteraciones en los niveles de insulina en el organismo, por ello es mayor la posibilidad de que los niños y jóvenes sufran de diabetes mellitus.

En cuanto a la obesidad infantil las estadísticas posicionan a la entidad por encima de la media nacional en niños menores de cinco años, que es de 9.7 y en el estado está en el 11.4%. En cuanto a niños de 5 a 11 años, la media nacional es de 34.4% y la entidad está en 30%.

Este es un problema multifactorial, pues depende del estilo de vida, consumo de comida rápida y sedentarismo, por lo que es necesario que los niños se activen.

Anteriormente se consideraba a la persona con sobrepeso como una persona que gozaba de buena salud, incluso había artistas plásticos que gustaban por plasmar en sus obras mujeres gordas y hombres gordos, sin embargo ahora se sabe que la obesidad tiene múltiples consecuencias en la salud.

Actualmente hay más gente con sobrepeso que en el pasado, lo que ha llevado a algunos expertos a hablar de una epidemia de obesidad.

TRATAMIENTO EFECTIVO

La cirugía metabólica ha probado ser efectiva para la remisión de la diabetes y enfermedades metabólicas asociadas. El síndrome metabólico es un padecimiento común pero pobremente diagnosticado y por tanto mal tratado.

Se define como síndrome metabólico al conjunto de factores de riesgo que predisponen el desarrollo de enfermedades cardiovasculares, de acuerdo con el doctor Jesús Benavides Olivera, coordinador de la Clínica de Obesidad de Pensiones Civiles del Estado.

La cirugía metabólica también es conocida como bariátrica, son los procedimientos quirúrgicos que inducen pérdida de peso, además de mejorar y en algunos casos normalizar el estado metabólico del paciente, es decir, si el paciente además de ser obeso cursa con enfermedades como diabetes mellitus, dislipidemias e hipertensión, la cirugía metabólica le ayuda a resolver estas enfermedades.

Las personas con síndrome metabólico que se someten a cirugía bariátrica mejoran dramáticamente de todas la comorbilidades como las que anteriormente se describieron que son consideradas progresivas y mortales.

Actualmente existen varios procedimientos de cirugía bariátrica en pacientes con obesidad y síndrome metabólico, entre las que destacan: banda gástrica ajustable, manga gástrica, derivación gastroyeyunal, mejor conocida como bypass gástrico tradicional; minigastric bypass y derivación biliopancreática (switch duodenal o procedimiento de Scopinaro).

La mejor opción para perder peso y controlar el metabolismo alterado es el bypass gástrico que consiste en reducir el tamaño del estómago y además crear un puente hasta el intestino delgado. Se logra disminuir la ansiedad por comer. Es un procedimiento por laparoscopia bajo anestesia general, el paciente permanece alrededor de 30 horas en el hospital y sale a reposo relativo a su domicilio por una semana. En un gran porcentaje de los casos controla la diabetes, colesterol alto y triglicéridos, apnea del sueño e hipertensión.

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