Cd. Cuauhtémoc, Chih.- En esta contingencia la solicitud de ayuda psicológica se ha incrementado en todos lados, pues la pandemia ha generado problemas de depresión y ansiedad, principalmente, sin embargo en las últimas semanas se ha registrado un fenómeno: hombres que sufren violencia en el hogar se están comunicando al *2232.
Ana Hernández, agente ciudadano del Fideicomiso para la Competitividad y Seguridad Ciudadana (Ficosec) en la región de Cuauhtémoc, mencionó que las llamadas en general recibidas en la Línea Ciudadana *2232, han ido en aumento registrándose en el mes de junio un incremento del 119% tan solo en Cuauhtémoc, ya que el servicio se ofrece en todo el estado.
“Hemos tenido atención hacia los hombres por violencia familiar. Han ya interpuesto denuncias personas del sexo masculino, eso es nuevo en lo personal para mí, no me habían tocado mucho estos casos, pero ya se empiezan a notar”, dijo.
Especificó que se trata de casos de violencia de mujeres contra hombres por manipulación, violencia física, violencia económica y patrimonial.
“Debemos de seguir trabajando para concientizar que no sólo las mujeres sufren violencia sino también los hombres. Hay que visibilizar toda esta problemática, pues es fundamental no quedarnos callados cuando suceden este tipo de situaciones”, dijo.
En el *2232 se proporciona ayuda psicológica y canalización de las personas que lo requieran a instancias especializadas, sobre todo gubernamentales para una atención más personalizada, pero además se ofrece asesoría jurídica y acompañamiento para establecer las denuncias.
Hernández agregó que otro fenómeno propio de esta contingencia, ha sido la violencia social o comunitaria, que se está generando actualmente dentro de los centros de trabajo, propiamente en la zona centro de Cuauhtémoc.
“Los propietarios o empleados mencionan que han recibido violencia por parte de los ciudadanos, quienes no quieren acatar las medidas sanitarias establecidas. Se enojan y humillan a quienes los atienden, incluso les gritan y los hacen sentir menos”, explicó.
Lo anterior, dijo, lo relacionan como un efecto de la violencia que los ciudadanos están viviendo al interior de sus hogares o bien por situaciones como la pérdida del empleo.
“La gente está explotando porque ya traen alguna violencia o padecimiento de salud mental y demuestra todo lo que trae arrastrando”, mencionó.
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