Impotencia y tristeza entre encargadas de estancias infantiles

Llegan hasta el sacrificio responsables de estancias infantiles para solventar gastos

Samara Martínez

  · viernes 8 de febrero de 2019

Tristeza, desilusión y un gran sentimiento de impotencia es lo que pasa por la cabeza de algunas de las responsables de estancias infantiles al enterarse de la decisión final del presidente Andrés Manuel López Obrador, ante el nulo apoyo económico para el programa.

El día de ayer el mandatario nacional reiteró que el sustento otorgado a las diversas estancias ya no se abonará más, pues ahora se entregará directamente a los adultos mayores, quienes serán los encargados de cuidar a los más de 350 mil niños que se quedarán sin el apoyo.

Dicha decisión fue tomada por los supuestos gastos excesivos, donde se presentaban informes adulterados y algunas irregularidades, señalando que las estancias contaban con niños no registrados ante Sedesol.

Al respecto, la responsable de la estancia infantil “Tía Magda”, ubicada en la colonia Chihuahua 2000, comentó que en dado caso de que existiera la corrupción dentro del programa esta se daba entre los altos mandos pues ellas trabajan arduamente para y por los niños. “Lo que nos pagaban a nosotras prácticamente era para pagarles a ellos, entre el agua, la luz y el pago de los demás servicios. Yo invito al presidente a que venga y vea cómo trabajamos, no somos como otras guarderías”, asegura la encargada.

En primera instancia se argumentó que el programa de estancias infantiles sufriría un recorte del 50 por ciento, lo que despertó protestas en la capital del país, sin embargo, la inconformidad no bastó pues las autoridades insistieron que la opción más viable es que los abuelos se hagan cargo de sus nietos.

“Los abuelos no son los responsables de los niños, ellos ya criaron a sus hijos, ya no tienen la energía, el tiempo ni las herramientas necesarias para que los pequeños se desenvuelvan en un ambiente correcto para el desarrollo humano; yo he tenido niños que se van para ser cuidados por sus abuelos y tiempo después regresan porque el adulto mayor no pudo hacerse cargo”, asegura la responsable.

Por su parte, todas las estancias se encuentran registradas ante la Secretaría de Educación Pública, pues desde hace tiempo se capacitó a las empleadas para impartir actividades lúdicas con el fin de que los niños salieran con el grado de prekínder cursado, sin este crecimiento infantil los pequeños pudieran atrasarse en el desenvolvimiento de capacidades.

“El presidente tiene que entender que con esta decisión se está perjudicando a la niñez, la está lastimando y nos duele porque al final de cuentas los que salen perdiendo son los niños y los padres de familia”, dice inconforme la trabajadora social.

La mayoría de las encargadas de estancias aseguran que la solvencia de los diferentes inmuebles es casi imposible pues los padres de familia no pueden aportar el pago que Sedesol hacía, lo que conlleva al cierre paulatino de todas ellas. “Cuando yo les comenté a los papás que era posible que cerrara la estancia todos me dijeron que no, que porque no tendrían en dónde dejar a sus hijos, que ellos me podían apoyar hasta con huevo”, agrega la encargada de “Tía Magda”.

Las estancias nacieron con el propósito de emplear a mujeres para apoyar a otras mujeres que no cuenten con trabajo estable o seguro social, la mayoría trabaja en hogares haciendo la limpieza y sus empleadores no las dan de alta ante el IMSS por lo que no tienen derecho a las guarderías de dicha institución.

“Estamos hablando de nuestros niños, yo me pongo a pensar en mis hijos, porque prácticamente esos niños se vuelven como tus hijos, ¿qué va a ser de mis niños?, ¿cómo le van a hacer mis mamás?, van a batallar, van a sufrir, van a descuidarlos porque por la necesidad del recurso pueden hasta dejarlos solos en sus casas”, comenta María Domínguez, responsable de la estancia “San José”.

Algunas de las responsables han tenido que tramitar préstamos con tal de no dejar a los niños sin el servicio infantil, pues al final de cuentas el sentido altruista que desempeñan día con día sale del humanismo social.

La responsable de la estancia “El Delfín Azul”, Claudia Fraire, destaca que de las 264 instancias infantiles que hay en el estado de Chihuahua, todas, durante más de 12 años han prestado un servicio de calidad y profesionalismo pues jamás se ha presentado queja con relación a los más de 5 mil niños que han pasado por el cuidado de ellas.

“Es triste saber que el Gobierno Federal dejará desempleadas a mujeres microempresarias que día con día aportan a la economía estatal, que durante más de una década cumplieron con la normativa correspondiente para ofrecer a los sectores vulnerables un espacio digno de cuidado”, asegura Claudia.

De igual manera, la encargada destacó que este tipo de acciones contribuyen a que los niños vivan en abandono, incitando a una vida en las calles sin la supervisión adecuada, lo que a su vez podría ocasionar problemas de abuso, violencia y traumas sicológicos de por vida.

*Gracias a ti, El Heraldo de Chihuahua Digital, está nominado al premio El Mejor de mi Ciudad 2018 como medio electrónico, Da clic aquí para votar por nosotros

*Gracias a nuestros lectores, El Heraldo de Chihuahua versión impresa, está nominado al premio El Mejor de mi Ciudad 2018 como mejor periódico, Da clic aquí para votar por nuestro periódico impreso

Te puede interesar: