El doctor Blas Juan Godínez Ortega sigue en estado delicado pero estable, actualmente se encuentra en coma inducido, en espera de su recuperación, de acuerdo al reporte médico.
Godínez Ortega continúa en el área de terapia intensiva del hospital Ángeles Chihuahua, donde se dan cita familiares, amigos, conocidos y militantes del Partido Encuentro Social.
Edilberto Royval, dirigente estatal del PES, confirmó que el doctor Blas Juan se encuentra en estado delicado, pero esperando su evolución.
Mientras que sus allegados coinciden en señalar que al parecer está avanzando positivamente, según los médicos.
A casi 10 meses después del secuestro del doctor Blas Juan Godínez en Gómez Farías, atentan contra su hijo, Blas Juan Godínez Jr., aunque durante este periodo se han registrado varios sucesos como el desplazamiento de médicos pasantes, el cierre de clínicas y enfrentamiento entre grupos criminales que se disputan la zona occidente de la sierra de Chihuahua.
Durante la madrugada del 9 de noviembre del año pasado, el doctor Blas Juan Godínez fue sacado de su casa por un comando en el municipio de Gómez Farías, en Chihuahua, cuyos integrantes llegaron hasta su dormitorio y se lo llevaron.
Tras estos hechos, los médicos y empleados del hospital protestaron por lo sucedido al doctor Blas, exigiendo seguridad.
Mientras que las decenas de médicos pasantes asignados a esta clínica fueron trasladados a la ciudad de Cuauhtémoc por agentes de la Fiscalía General del Estado; tuvieron que huir para evitar ser llevados por los narcotraficantes. Dicha decisión se tomó luego del secuestro del médico Godínez, perpetrado en Gómez Farías.
Una semana después, diversos municipios de la zona serrana en la entidad se quedaron sin servicios de los hospitales y centros de salud, esto ante la inseguridad que se vive, derivada de la presencia de integrantes del crimen organizado.
Fueron autoridades del Sector Salud quienes informaron que los centros de salud de Buenaventura, Ignacio Zaragoza, Gómez Farías, Madera y Namiquipa permanecerían cerrados ante la ola de violencia que impera en esos lugares, especificando que únicamente las personas que requirieran atención médica de manera urgente serían trasladadas a hospitales de ciudades cercanas como Cuauhtémoc y Nuevo Casas Grandes.
El cierre de estas clínicas se originó después del secuestro del director del hospital comunitario en Gómez Farías, Blas Juan Godínez, de quien hasta el momento no se tiene información alguna sobre su paradero.
Según los hechos, unas horas antes de tomar posesión como presidente electo de Gómez Farías, el doctor Blas Juan Godínez Jr. recibió un balazo que se alojó en su cráneo y la bala debió ser extraída en una cirugía que tardó seis horas, esperando una favorable evolución.
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