El módulo de sanitización ubicado en la Central de Abasto, en la avenida Juan Pablo Segundo, atiende a un promedio de 500 personas diarias, ya que la afluencia en este sitio se mantiene debido a la mercancía que comercializan.
A toda aquella persona que ingresa caminando a dicho lugar se le toma la temperatura, aplica gel antibacterial y es rociado para ser sanitizado; pero quienes ingresan en vehículo no son revisados, al menos en este punto.
Este módulo se instala desde las 05:00 horas y hasta aproximadamente las 13:00 o 14:00 horas, periodo en el cual cruzan cientos de personas para hacer sus compras.
Esta acción se emprendió hace unas semanas para tratar de detectar a personas con síntomas del Covid-19 e impedirle el ingreso al sitio, puesto que esto provocaría una serie de contagios durante las compras-ventas.
Lo que llama la atención es que las personas son rociadas desde de una capa antes de entrar a la Central de Abastos, lo que es acatado por los asistentes que sabe que es por bien propio y el de terceros.
Pueden observarse ingresar desde mayoristas hasta personas que asisten para abastecer la despensa en sus viviendas.
Te puede interesar: