A través de canciones, juegos y libros para colorear, es como los bomberos de Chihuahua enseñan a pequeños a salvar su vida en caso de un incendio, fomentando una cultura de prevención a nivel preescolar en Chihuahua capital, donde se ha instruido en más de 100 escuelas, impactando a 17 mil personas en poco más de dos años.
“Mis Primeros Pasos en la Prevención de Incendios” es un programa del Heroico Cuerpo de Bomberos, en el que los elementos instruyen a los menores que cursan el jardín de niños, con el objetivo de crear una conciencia de prevención y reacción ante los siniestros con fuego para salvaguardar la integridad de los más pequeños.
El programa consta de ocho lecciones en los que se enseña a los niños a: alejarse de cosas calientes, no jugar con cerillos o encendedores, cómo actuar en caso de que se incendie la ropa, que hacer en caso de sufrir una quemadura, gatear por debajo del humo para salir de un incendio, reconocer el sonido de una alarma o detector de humo para ponerse a salvo, hacer un plan de escape para salidas de emergencia y reconocer la figura del bombero como el de un amigo.
En cada uno de los puntos de este programa se cubren aspectos pedagógicos para que los niños sepan cómo protegerse del fuego a través de la integración de dinámicas, canciones y juegos, que se utilizan como metodología para transmitir de manera significativa los conocimientos y habilidades.
“Con estos ocho puntos fomentamos una cultura de prevención a nivel preescolar en el estado de Chihuahua”, manifestó Aarón Loya, bombero de academia y miembro del Grupo de Prevención del Heroico Cuerpo de Bomberos, quien explicó que los tragahumo acuden diariamente a una escuela, aunque hay veces que deben hacer dos visitas al mismo plantel, dependiendo del número de estudiantes.
El Grupo de Prevención del Heroico Cuerpo de Bomberos está integrado por seis elementos. Cada uno de llos se hace cargo de un salón y empiezan a desarrollar el tema de una manera didáctica, lo que incluye una parte teórica y escenarios para poner en práctica lo aprendido, y para reforzar cada punto se baila una canción diseñada dentro del contenido del programa; finalmente se le otorga un libro para colorear retomando las lecciones aprendidas.
La participación de los padres es trascendental, por ello también son capacitados en temas de prevención en el hogar, emitiéndoles algunas recomendaciones en concreto para las instalaciones eléctricas y de gas.
El citado programa es un modelo americano que fue modificado por el bombero segundo Pedro Enrique Bocanegra Reyes, adecuándolo a las necesidades y condiciones de la capital del estado, con el asesoramiento de personas que tienen noción del formato original.
La botarga Sparky también incide en el programa, mascota que hace aún más dinámicas y divertidas las actividades ofrecidas por los bomberos.
“Es una experiencia verdaderamente satisfactoria poder enseñarles a los niños cosas que trascienden más allá de un incendio; una maestra platicaba cómo un pequeño, después de ser parte del programa, se puso a salvo en medio de una balacera donde lamentablemente su padre perdió la vida. El niño al escuchar los disparos, al sentir riesgo, comenzó a gatear desde su casa y se metió debajo de un carro, al igual que si hubiera detectado humo. Todo lo que se le enseña a un niño, deja huella”, expresó el bombero Loya.
Cabe mencionar que luego de que este programa permaneciera suspendido durante varios años, se retomó desde enero de 2018, periodo en el que se ha instruido en más de 100 escuelas, llegando a más de 17 mil personas, entre alumnos, maestros y padres de familia. Aunado a ello se calcula que suman 11 mil personas a las que se han extendido los conocimientos con los que se busca salvar vidas.
Este programa se atiende por solicitud dirigida a la Dirección de Seguridad Pública Municipal a través de oficios firmados por autoridades educativas, teniendo actualmente una importante demanda de las escuelas.
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