"Basta de violencia"; se reúnen obispos de la frontera para pedir por la paz

Cientos de feligreses, sacerdotes, diáconos y los obispos Bishop Mark Seitz y José Guadalupe Torres Campos de El Paso y Ciudad Juárez, respectivamente, se reunieron este jueves

  · jueves 28 de julio de 2022

Jorge Meza | El Heraldo de Juárez

Cientos de feligreses, sacerdotes, diáconos y los obispos Bishop Mark Seitz y José Guadalupe Torres Campos de El Paso y Ciudad Juárez, respectivamente, se reunieron este jueves, para realizar la vigilia Por la Paz "La Paz Sea Contigo, Soy Artesano de la Paz".

En peregrinación llegaron los feligreses a El Punto desde el Parque Hidalgo, con cruces y mantas con la imagen de hombres y mujeres desaparecidos.

"Somos hermanos, como hombres de fe no existen frontera, la unidad, hemos sido convocados para orar por la paz, el lema da sentido a nuestra presencia aquí, Cristo nos da la paz, pero también en respuesta, yo soy artesano de la paz, nuestro compromiso", expresó el obispo de Ciudad Juárez.

Jorge Meza | El Heraldo de Juárez

"Un clamor unánime en el mundo, en México, en el estado, en la ciudad, basta de asesinatos, basta, tenemos que ser artesanos de la paz, muertes cada día de niños, jóvenes, adultos, mujeres, religiosas, sacerdotes", destacó.

"Tenemos que unirnos, trabajar juntos, carguemos la cruz de nuestros hermanos, de tantos migrantes, de los que sufren, momento de oración, de vigilia por la paz", agregó.

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El obispo de El Paso expresó "un gusto estar con ustedes, hay gente que estan pensando porque estan juntos los católicos en El Punto, tenemos una arma que tiene poder para cambiar los corazones, el señor esta listo para cambiar nuestros corazones, para unirnos y vencer esta violencia, es la oración, hay un camino de la vida y de la muerte, el camino de la vida va a ganar, solamente necesitamos vivir más plenamente, iniciar por nosotros, necesitamos amar más a los vulnerables, respetar la vida de los no nacidos, de nuestras familias, si hacemos esto vamos a cambiar la sociedad, no habrá lugar para los violentos".

Los obispos encendieron las velas del Cirio y luego la compartieron con los jóvenes y la propagaron entre los cientos de asistentes.