Los migrantes que se encontraban a la deriva del río Bravo esperando tener un encuentro con la Patrulla Fronteriza, este viernes fueron recibidos en la madrugada por personal de la Oficina de Aduana y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP en sus siglas en inglés), por lo que el límite de la frontera luce sin migrantes.
Según declaraciones que hizo Óscar Ibáñez, representante de la Gobernadora del Estado en una estación radiodifusora, autoridades norteamericanas dejaron entrar a todos los migrantes, para realizar su procesamiento.
Esto fue con la finalidad de resguardarlos de las bajas temperaturas que se presentaron por la madrugada.
Desde el miércoles, la Patrulla Fronteriza apresuró el proceso para dar entrada a más de 700 migrantes, principalmente de Nicaragua, que esperaban envueltos en cobijas sufriendo por las inclemencias del clima.
Para mejorar el tiempo de procesar la entrada de cientos de personas, desde ayer se eliminó el uso de Autobuses Móviles de Procesamiento en Ruta (MERP por sus siglas en inglés).
Se pudo observar, que la Patrulla Fronteriza, en vez de recibir 50 migrantes por autobús, ingresaron grupos de hasta 200 personas.
A las cuales llevaron caminando al Centro de Procesamiento del sector de El Paso, que se encuentra a dos cuadras del área por donde ingresan ilegalmente los migrantes.
El ir caminando reduce el tiempo de entrada a Estados Unidos, en vez de esperar la ida y vuelta del MERP.
El bordo fronterizo, por el momento luce sin la enorme fila de migrantes y del lado mexicano estará custodiado por Patrullas de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal.
Publicada originalmente en El Heraldo de Juárez