El intenso frío no mermó los ánimos de algunos migrantes que pernoctaron al exterior de las oficinas quemadas del Instituto Nacional de Migración, en la avenida Rivas Guillén.
Cerca de 15 migrantes, en su mayoría venezolanos, durmieron sobre las banquetas e instalaron sus casas de campaña junto al estacionamiento de Presidencia.
Para la mañana, el número de extranjeros fue en aumento poco a poco y de nueva cuenta empezaron a reunirse para continuar con su protesta, exigiendo justicia por la muerte de sus compatriotas.
En el lugar se hizo más notoria la presencia de medios internacionales, quienes buscaban hablar con familias y sobrevivientes a esta desgracia.
A su vez, en el memorial instalado en una de las rejas del INM, fueron colocados más arreglos florales y veladoras en memoria de los fallecidos.
De pronto, un hombre que llegó al lugar, se ató un lazo al cuello y se amarró en las mismas rejas, en solidaridad con los migrantes.
Además se informó que cerca de las 3:00 de la madrugada arribó personal de investigación de la FGR para continuar con las indagatorias.
El Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, señaló que para la tarde del miércoles se daría a conocer la cifra oficial de víctimas así como sus nacionalidades.
Publicado primero en: El Heraldo de Juárez