Francisco Antonio Molina es uno de los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, que estuvo en acción en el enfrentamiento donde se detuvieron a criminales culpables del trágico “Jueves Negro”.
El heroico policía resultó gravemente lesionado e incapacitado para realizar sus labores, sin embargo, da gracias por la oportunidad de estar con vida.
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“Ese día, fue muy lamentable, desde muy temprano siempre anda uno alerta, todo empezó con las riñas dentro del Cereso, fue un día bastante violento para toda la ciudadanía, lamentablemente se perdieron vidas inocentes, mujeres, hombres y niños que no tenían nada que ver con esa violencia, y me tocó a mí estar lesionado en el enfrentamiento que se dio ante un grupo delictivo”, es como Molina describe lo ocurrido el 11 de agosto del 2022, cuando criminales hicieron distintos ataques por toda la ciudad.
El sustantivo tenía ocho meses dentro de la corporación policiaca cuando ocurrió la tragedia. Molina recibió un proyectil en la pelvis, le perforó el intestino grueso y le ocasionó una infección, por lo que fue sometido a múltiples operaciones, también recibió otros dos impactos de lado del estómago, pero no le provocaron secuelas graves.
Antonio Molina tiene dificultad para caminar, sin embargo, al ponerle una prótesis en su cadera podría corregir su problema, pero corre un alto riesgo de que quede sin movimiento en sus piernas.
“Nosotros estamos expuestos a estar lesionados, por eso a nosotros se nos capacita por medio de una Academia, reitero es imposible decir que los delincuentes, estén mejor armados que nosotros, a mí se me adiestro y aun así me tocó, pero puedo ser a cualquiera de mis compañeros”, explicó el agente al cuestionarlo, si tenían el armamento ideal para dar combate.
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El enfrentamiento donde recibió los impactos de bala fue en la colonia Ampliación Aeropuerto, en las calles Ajenjo y Copaiba, donde se arrestaron a cinco responsables por los hechos violentos, donde murieron 11 personas y 12 resultaron lesionadas.
El agente Molina compartió un mensaje a sus compañeros policías: “Que nunca decaiga el ánimo, debemos dar el 100 o 200 por ciento siempre en el día a día, debemos estar siempre alerta, siempre cuiden su persona y a su familia porque no sabemos si el día de mañana podemos regresar a casa”.
“Al señor presidente, más que nada darle las gracias por el apoyo a mi persona y a mi familia, porque siempre han estado dando la cara por uno”, finalizó el agente Molina.
Francisco Antonio Molina, actualmente tiene 33 años de edad, es pensionado, quedó como policía segundo; anteriormente del 2015 al 2021 estuvo adscrito como policía estatal, casado, tiene dos hijas de 2 y 7 años de edad.
Publicada originalmente en El Heraldo de Juárez
