Días atrás se comentó que los migrantes que arriban a Tuxtla Gutiérrez son marcados con cinco distintos sellos por parte de quienes ellos identifican como traficantes de personas.
Los sellos son marcados en los brazos de los migrantes que cruzan por la frontera sur de México para transitar en territorio nacional rumbo a Estados Unidos, ya que es su meta.
➡️ Únete al canal de WhatsApp de El Heraldo de Chihuahua
Sobre esta información, el Pastor Román Domínguez, quien dirige el albergue Oasis de Migrantes dijo desconocer esta información, "y si es una nueva forma de operar pronto se va a dar a conocer en esta frontera".
"No, nos daríamos cuenta porque de hecho nosotros checamos tatuajes, la piel y todo eso -de los migrantes que ingresan-", mencionó Domínguez.
Se especificó que los sellos con los que marcan a los extranjeros son de color rojo, vino, negro, azul y verde. Cada marca tiene una duración y la distancia que pueden avanzar los extranjeros desde la frontera sur al centro o norte del país.
Lo antes mencionado lo externó el director del Centro de Dignificación Humana, Luis García Villagrán, quien agregó que "según el color, según el cártel, según la durabilidad, según el recorrido a donde van, a donde tienen que llegar".
Hasta el momento ninguna de las personas en situación de movilidad han dicho sobre esta dinámica a Domínguez, por lo que cree que es una nueva estrategia para quienes ingresan a México.
"Independientemente de todo eso, lo que tengo que decir es que esos sellos van dirigidos al Ejército, a la Guardia Nacional y a la Marina, principalmente. Y ellos se lo pasan a migración, y ya migración sabe hasta dónde van, según el color”, dijo García Villagrán.
El funcionario reveló que los costos de los sellos van desde los 700 dólares, sin embargo, indicó que también hay pulseras que tienen un precio de cinco mil dólares, con las cuales los migrantes pueden transitar hasta la frontera con Estados Unidos.
“Hay uno que es pase local, uno deforme, digamos. También depende de cada forma del sello (…) Pero eso es un negocio de los traficantes, que vieron que pueden sacar más dinero a los migrantes”, concluyó.
Nota: El Heraldo de Juárez
