JUÁREZ, Chih.- Personas que se dedican a la “ordeña” de combustible de los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex), mejor conocidos como “huachicoleros”, ofrecen diésel robado entre los permisionarios del transporte público de Ciudad Juárez y acuden incluso hasta los mismos talleres a vender su mercancía obtenida ilícitamente.
Así lo dio a conocer un permisionario de la ruta Poniente Sur, quien señaló que estas personas ya han ido en varias ocasiones a su taller a ofrecerle el producto robado.
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Lo anterior se informó, luego de que el pasado fin de semana, el personal de Custodia y Seguridad Física de Petróleos Mexicanos detectara un tractocamión conectado clandestinamente a una toma que está ubicada en la zona suroriente de la ciudad, sitio donde estaban extrayendo gasolina de manera ilegal.
Aunado al robo de gasolina se suma también el del diésel, combustible que utilizan las unidades del transporte público, así como camiones pesados, y que los mismos “huachicoleros” señalan que se lo roban cerca del poblado de Samalayuca, que es donde tienen el “piquete”, que es como se refieren al ducto perforado cuando ya está siendo “ordeñado”.
“Te venden y te ofertan 20 mil litros de diésel y te dicen que ellos te lo llevan al taller, no aceptan que les compres menos de esa cantidad. O son 20 mil litros o no te venden nada”, señaló el permisionario de transporte público, quien solicitó el anonimato a cambio de dar su versión.
El mismo permisionario indicó que ya hacía más de 2 años que no le ofrecían diésel robado, sin embargo desde el mes de noviembre del año pasado volvieron los huachicoleros a visitar su taller.
La fuente consultada dijo además que los “huachicoleros” ofertan el diésel en 15 pesos por cada litro, cuando en las estaciones de servicio ronda los 22 pesos cada litro.
“Te condicionan la venta y claro que no hay factura por dicha venta, es un verdadero riesgo comprarles porque el SAT (Servicio de Administración Tributaria) nos tiene bien vigilados y ellos saben cuánto compramos de diésel y 20 mil litros no puedes esconderlos tan fácilmente, además que estamos conscientes que es un delito comprar algo que de antemano sabemos que es robado”, señaló el denunciante.
Por último, el permisionario indicó que son varias las personas que se dedican a este ilícito negocio y acuden directamente a los talleres de varios permisionarios para tratar de vender el combustible robado.
“Te dejan su número de celular para que te comuniques con ellos y les marques cuando necesites combustible; quiero imaginar que sí hay transportistas que les compran el combustible”, concluyó el permisionario de transporte público.
