CD. JUÁREZ.- En un entorno de crisis migratoria, manifestaciones y un caos humanitario por los cientos de migrantes que se encuentran de manera ilegal en las calles de El Paso, Texas, el presidente de Estados Unidos Joe Biden realizó su primera visita a la frontera entre Estados Unidos y México, donde además se generaron algunos reclamos y manifestaciones de parte de algunos ciudadanos que le exigieron terminar con el cruce ilegal de indocumentados.
Fueron aproximadamente cuatro horas el tiempo que duró el presidente en la ciudad de El Paso, donde visitó Aduana y Protección Fronteriza (CBP por sus siglas en inglés), el bordo del río Bravo, Centro de Servicios para Migrantes del Condado de El Paso, todo dentro de un operativo especial realizado por los tres niveles de gobierno estadounidense.
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La visita se centró en el tema migratorio de esa zona fronteriza entre México y Estados Unidos, pues el presidente Biden se reunió en los puntos medulares de Texas, para conocer la operatividad, el manejo de indocumentados y los apoyos que reciben los mismos para que puedan llegar a sus destinos en otros condados o ciudades.
Posteriormente se dirigió al aeropuerto internacional para abordar el avión presidencial y luego partió rumbo a la Ciudad de México, para estar presente en la Cumbre de Líderes de América del Norte.
Pasado el mediodía, 12:30 horas, el mandatario de Estados Unidos descendió del avión presidencial para llegar por primera vez a El Paso, Texas, desde que asumió su mandato.
Llegó acompañado de Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional, y Antony Blinker, secretario de Estado, así como los congresistas: Verónica Escobar, del distrito 16; Vicente González, del distrito 34, y Henry Cuellar, del distrito 28; mientras que Joe Biden fue recibido por Greg Abbot, gobernador del Estado de Texas, y Oscar Lesser, alcalde de El Paso.
Luego de saludarlo cordialmente, el gobernador de Texas le entregó una carta al presidente donde le solicita que haga su trabajo y asegure la frontera, que se cumplan las leyes federales de migración, esto para contener el cruce de indocumentados y terminar con esta problemática que se está formando en las calles de El Paso.
Abbott proporcionó cinco acciones específicas que el presidente puede tomar de inmediato para asegurar la frontera y restablecer el orden en una crisis de migración fuera de control, realizar deportaciones, además de que lo invitó a continuar con la construcción del muro fronterizo y la designación de terroristas a los grupos del crimen organizado que operan en México.
“Este caos es el resultado directo de su fracaso en hacer cumplir las leyes de inmigración que promulgó el Congreso”, dice la carta. "Sus políticas de fronteras abiertas han envalentonado a los cárteles, que se enriquecen traficando con fentanilo letal e incluso con seres humanos”, agregó.
“Los texanos están pagando un precio especialmente alto por su fracaso, a veces con sus propias vidas, como le dirán los líderes locales de su propio partido si se les da la oportunidad. En nombre de todos los estadounidenses, les imploro: Aseguren nuestra frontera haciendo cumplir las leyes de inmigración del Congreso", resaltó.
Le manifestó en dicho documento: Debe cumplir con los muchos estatutos que exigen que varias categorías de extranjeros; “deberán” ser detenidos y poner fin a la práctica de poner ilegalmente en libertad condicional a extranjeros en masa.
Debe dejar de entorpecer la implementación de la política Permanecer en México y expulsiones del Título 42 y hacer cumplir plenamente esas medidas como lo han ordenado los tribunales federales que hagas.
Debe procesar agresivamente la entrada ilegal entre los puertos de entrada y permitir que ICE expulse a los inmigrantes ilegales de acuerdo con las leyes federales existentes. Debe reanudar inmediatamente la construcción del muro fronterizo en el estado de Texas, utilizando los miles de millones de dólares que el Congreso ha asignado para ese propósito. Debe designar a los cárteles de la droga mexicanos como organizaciones terroristas extranjeras.
El primer punto que visitó el presidente Biden fue Aduana y Protección Fronteriza (CBP), en el Puente de las Américas, donde sostuvo una conversación con los agentes fronterizos sobre temas de cruces ilegales; agentes le hicieron una demostración de cómo registran los vehículos en busca de drogas, dinero y otro contrabando.
Después de acudir al CBP, el presidente realizó un recorrido a pie por el bordo del río Bravo, el cual no tenía agendado.
Lo realizó acompañado del alcalde de El Paso, Oscar Lesser, y el resto de su comitiva de seguridad y autoridades.
El punto donde realizó el recorrido fue a la altura del bulevar Norzagaray y Arroyo de las Víboras, al norponiente de la ciudad.
Biden inspeccionó el puerto de entrada a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México.
Su último punto de visita fue un Centro de Servicios para Migrantes del Condado de El Paso, donde permaneció sólo algunos minutos y en el cual el personal le solicitó “fondos” para comprar los artículos que ofrecen a las personas en situación de movilidad.
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Le dieron a conocer las limitantes con las que están trabajando y le mencionaron que en promedio reciben entre 300 y 500 personas migrantes.
“Nosotros les damos alimento a los migrantes que lleguen, agua, tenemos calcetines, jabón, pasta dental para que puedan seguir su camino”, le comentó personal del Centro de Servicios para Migrantes.
A lo anterior, el presidente dijo: “lo que ustedes hacen es sorprendente, ¿que creen que es lo más efectivo que yo pudiera hacer? (cuestionó)”. A su pregunta, le respondieron “fondos” (para qué) para los productos que les proporcionamos a los migrantes, por el proceso que conlleva todo esto”.
A las 16:15 horas, tiempo de la montaña de EUA, 17:15 hora de la Ciudad de México, partió Joe Biden desde el aeropuerto internacional de El Paso, Texas, rumbo al aeropuerto internacional Felipe Ángeles, ubicado en la Ciudad de México.
Joe Biden se despidió de El Paso, Texas, prometiendo mejorar la seguridad fronteriza y el problema migratorio que aquí se vive.
Manifestación
Ante el recorrido del presidente de Estados Unidos Joe Biden a El Paso, decenas de personas se manifestaron en contra de su visita, en uno de los centros donde se procesan migrantes.
Este hecho fue afuera de la estación número 1 de la Patrulla Fronteriza, donde varias personas se reunieron para manifestarse en contra de la visita del presidente.
La mayoría de los manifestantes son simpatizantes del expresidente Donald Trump y republicanos.
“Queremos que Biden sepa que aquí en El Paso hay muchos y sobre todo hispamos porque somos más del 81 por ciento de la comunidad que no le cree a sus mentiras”, expresó Irene Armendáriz, líder del Partido Republicano.
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“Y que él ha causado todo el caos que está en toda nuestra frontera, no nada más aquí en El Paso”, añadió.
En colaboración con: Ricardo Holguín
Nota publicada en: El Heraldo de Juárez
