A la evaporación del 98 por ciento del agua de la presa Las Lajas, se suma otra arista del problema de escasez de agua en la cuenca hidrológica del río San Lorenzo, zona en la que se encuentra el embalse: la sobreexplotación de mantos acuíferos debido a la proliferación de pozos irregulares.
De acuerdo con productores agrícolas de aquella región del noroeste del estado, la sobreconcesión de pozos impide que haya escurrimientos naturales, lo que ha propiciado que los manantiales se sequen y que la presa Las Lajas esté completamente abatida, lo que además acarreará grandes pérdidas para quienes dependen de ella.
A pesar de que desde 1955 existe una veda en el acuífero de 2012 a la fecha la Comisión Nacional del Agua ha otorgado 162.3 millones de metros cúbicos (Mm3) para 395 pozos, tan solo en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador se otorgaron 346 concesiones de pozos.
La cuenca está integrada por los acuíferos de Santa Clara y Flores Magón Ahumada, la parte alta que es Santa Clara surte de agua a la presa Las Lajas, desde 1953 que se empezó a hacer la medición de agua en el río con la estación meteorológica La Trasquila, se estimó el flujo base del río en 35.8 Mm3 anuales, es decir, era el promedio de agua que le llegaba al río en épocas normales a través de manantiales, escurrimientos, que también se llama descarga natural comprometida.
Los productores de la zona de Buenaventura tienen registros de que en el 2012 Conagua tenía entregados 29 Mm3 para uso agrícola en el acuífero Santa Clara, lo que desató una lucha por el agua debido a los pozos ilegales y los presones que algunos productores construyen.
Desde 1955 que se constituyó el Distrito de Riego 089, que se beneficia del agua de la presa Las Lajas.
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Las aguas de la presa Las Lajas están concesionadas a dos asociaciones de productores: la Asociación Civil de Usuarios del Distrito de Riego 089 El Carmen A.C., con 24.7 millones de metros cúbicos y al Módulo 4 Benito Juárez con 32.3 Mm3 para un total de 57 Mm3 de concesión, de una capacidad de 82 Mm3 de la presa.
De esa fecha se han entrado 162.3 Mm3 del acuífero de Santa Clara, cuando solo había disponibles 23.1 Mm3 para extraer entre todos los pozos de la zona.
A la fecha se tienen concesionados 191.5 Mm3 a 551 usuarios, de acuerdo con el Registro Público de Derechos de Agua REPDA de Conagua, pero la extracción aumenta hasta 250 Mm3, lo que es el origen de la falta de agua en el río, que repercute en la captación de agua en la presa Las Lajas.
Los productores destacaron que ya se secaron los manantiales que había en la zona de Namiquipa, los cuales estaban pegados al municipio de Buenaventura, entre los que se encuentran Ortega.
“Es un ecocidio, estamos viendo cómo vamos a proceder en contra de Conagua”, aseguró Martín Solís, uno de los productores de la zona.
La situación es crítica, sobre todo porque la cuenca hidrológica abarca terrenos de Riva Palacio, Namiquipa y Buenaventura, donde las principales pérdidas se registrarán en los cultivos del nogal y del chile destinado a chiles secos.
Los productores destacaron que no existen condiciones de lluvia para los próximos 15 días, lo que provocará una descarga de nogales, que sin duda va a repercutir en la producción de una cosecha de alto valor.
Además sin agua el cultivo de chiles dejará de producir, “es una pérdida bastante grandes y es una indolencia de la Comisión Nacional del Agua por haber entregado este año más volumen de lo que debió haberse entregado de la presa”, señaló Martín Solís, ex encargado del departamento de Agricultura de la Secretaría de Desarrollo Rural